Asparrena regula la estética y acabados de las nuevas urbanizaciones

La ordenanza aspira a «fomentar la accesibilidad universal y la seguridad peatonal, en bicicleta, el fomento del transporte público, la reducción del consumo energético y a la utilización del agua de lluvia para el riego y limpieza de las calles».

Así que define detalladamente aspectos como la anchura mínima de las aceras, un detalle que a veces ocasiona problemas «porque puede quedar con una relación poco armónica con el resto de los edificios cercanos», según Auzmendi. Así que las nuevas aceras tendrán a partir de ahora un mínimo de dos metros. Su remate podrá ser de adoquín de hormigón en colores ocres o tostados cuando por la zona vaya a discurrir tráfico lento o solo peatones. Serán de hormigón donde ya exista ese material previamente o como el pavimento que haya en el ámbito colindante al que se vaya a urbanizar.

Seguridad

Uno aspecto muy cuidado en la ordenanza es «la seguridad peatonal», explicó la alcaldesa. Así, se ordena que la subida y bajada de los vehículos públicos, sea «desde espacios seguros y accesibles». Precisamente los vados cercanos tendrán que estar libres de objetos que impidan la visibilidad de la calzada. Lo mismo ocurre con los aparcamientos, que tendrán 4,5 metros y además, teniendo en cuenta el cambio de modelo energético, el Ayuntamiento pide que «se diseñen con la posibilidad de una fácil conexión a la red de suministro eléctrico para facilitar la implantación de sistemas de recarga de baterías». A eso se une que todas las nuevas luces del alumbrado público serán de led. También está regulada la pendiente de las tuberías de saneamiento está regulada para que no se produzcan atascos.

Hasta el tipo de arbolado está contemplado, «para tener el cuenta la seguridad desde la perspectiva de género y peatonal», apoyó Auzmendi, de manera que no pueda haber «personas al acecho». Y si los árboles son grandes serán preferiblemente de espacies autóctonas y que no causen daños al mobiliario, el pavimento, las personas ni a los vehículos. En el mobiliario urbano, Asparrena apuesta por «la investigación e innovación» a la hora de elegir juegos infantiles, equipos de ejercicio para mayores, contenedores para perros o compostadores.

También resuelve una cuestión espinosa, el mantenimiento. En el caso de garajes bajo una plaza pública «corresponderán al Ayuntamiento el alumbrado público, acabados superficiales, incluidos los elementos de agarre o anclaje, y los elementos de defensa contra las caídas», mientras que los propietarios asumirán «las impermeabilizaciones, incluida su protección y aislamiento térmico, la formación de pendientes y la estructura portante».