Una de las dos torres de Arkamo acabó destrozada tras el ataque del pasado fin de semana. E. C.

La Ertzaintza investiga el quinto sabotaje contra un proyecto eólico en Álava en diez meses

El Gobierno vasco e Iberdrola han denunciado el derribo de una torre de medición instalada en Arkamo ocurrido este fin de semana

Miércoles, 14 de abril 2021, 12:15

Cinco sabotajes han sufrido desde el pasado verano las torres colocadas en los montes de Álava para estudiar la posibilidad de convertir el viento en ... energía de cara al futuro. La Sierra de Arkamo, entre Ribera Alta y Valdegovía, sufrió hace pocos días el último ataque por parte de desconocidos que, sin embargo, no trascendió hasta ayer. Se derribaron las dos estaciones que Aixeindar, la sociedad que componen el Gobierno vasco e Iberdrola, había colocado allí para las mediciones. No es la primera vez que se ensañan en este punto con unas estructuras que rondan los 80 metros de altura, ya que hace unos meses intentaron 'tumbar' una de ellas. Los dos ataques restantes se habían registrado en los Montes de Iturrieta. El suceso más reciente se ha denunciado ante la Ertzaintza, que intentará esclarecerlo.

Publicidad

Colectivos contrarios a estos proyectos negaron ayer su participación en los hechos, aunque recalcaron que «hay mucha gente en contra» de los parques que tiene en mente la sociedad público-privada. Además de los saboteados de Arkamo e Iturrieta, Aixeindar tiene planes para Azáceta, Labraza y Aramaio, que se encuentra en fase mucho más embrionaria. Esta abundancia de proyectos para Álava contrasta con la ausencia de similares para Bizkaia y Gipuzkoa. Esto ya se ha traducido en polémica política y tensión social en la zona rural frente a la rotunda apuesta de las administraciones por las renovables. El diputado general de Álava, Ramiro González, argumentó esta semana que la nueva Ley de Cambio Climático establece que el 42% de la energía deberá ser 'limpia' en 2030, cuando ahora apenas supone un 7%.

En su contexto

  • 80 metros de altura rondan estas torres de medición que calculan la velocidad del viento y la posibilidad de convertirlo en energía.

  • Dos en Arkamo. Dos estaciones de este tipo acabaron destrozadas la semana pasada tras un sabotaje. Previamente, desconocidos ya habían actuado contra una de estas torres.

  • Otros en los Montes de Iturrieta. La sociedad Aixeindar comunicó ayer que en los últimos meses también se han registrado ataques en los Montes de Iturrieta, Arraia-Maeztu.

  • Cinco proyectos. Esta empresa compuesta por el ente de la energía del Gobierno vasco e Iberdrola tiene en cartera cinco proyectos para Álava. Además de Arkamo e Iturrieta, se encuentran el puerto de Azáceta, Labraza y el recién conocido en Aramaio. Esto no se debe traducir en que se instalen molinos en los cinco puntos.

Lakua e Iberdrola no acusan directamente a nadie como posible autor o instigador de estos ataques, pero sí que denuncian que «suponen una clara coerción dirigida a impedir toda investigación del recurso del viento en posibles ubicaciones y una amenaza para la sostenibilidad energética futura de Euskadi».

No es la primera vez que las eólicas no tienen el viento a su favor en Álava. En 2009, el Parlamento vasco cedió tras dos años de iniciativas institucionales, disputas políticas y movimientos sociales y paralizó todos los parques de molinos que había sobre la mesa y que, entonces como ahora, estaban volcados preferentemente en el territorio alavés. En ese sentido, Aixeindar lamentó que el País Vasco «lleva más de una década de retraso respecto a las comunidades vecinas».

Publicidad

Desacertada

Los proyectos de Arkamo, Iturrieta y Labraza se encuentran en fase de tramitación medioambiental. Se da la circunstancia de que el proyecto para la sierra de Ribera Alta es uno de los que menos posibilidades tiene de salir adelante porque, como adelantó en exclusiva este periódico, el Departamento de Medio Ambiente de la Diputación de Álava presentará alegaciones al considerar desacertada su ubicación en una zona de especial interés ecológico y sus características.

«Aixeindar pretende contribuir a la descarbonización del sistema energético en aras de disminuir los efectos del cambio climático en Euskadi mediante la puesta en marcha de parques eólicos que aporten energía renovable que sustituya directamente a otras fuentes fósiles que se están utilizando a día de hoy», justificaron portavoces de la sociedad público-privada. Ésta plantea una estrategia en donde además de grandes centrales se necesitará la aportación de «pequeñas instalaciones».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad