Los afectados por ERTE podrán sacar hasta 6.000 euros de sus fondos de pensiones

Muy pocos conocían lo que era un ERTE hasta que el contagio de coronavirus debilitó la economía mundial. Ya hay 52.155 alaveses que están afectados por los 3.891 expedientes registrados y la Administración teme que, pese a la desescalada sanitaria, sigan creciendo. Para tratar de rebajar sus perjuicios en las familias, la Diputación ha aprobado una serie de medidas fiscales para darles un respiro.

El diputado general, Ramiro González, anunció que se iba a flexibilizar la posibilidad de sacar dinero de los planes de pensiones o EPSV (Entidades de Previsión Social Voluntaria). Pues, según la documentación a la que ha tenido acceso EL CORREO, esa cantidad no podrá superar los 6.000 euros y tendrá que solicitarse antes del 1 de julio y verse satisfecha a más tardar el 31 de agosto. La ventaja es que quien se acoja a esta posibilidad tampoco se verá penalizado tributariamente cuando finalmente rescate el resto de sus depósitos. Porque, hasta la fecha, si primero se rescataban ahorros, el restante tributaba al 100%.

En la letra pequeña de este decreto normativo de urgencia fiscal, se detalla que, además de los afectados por ERTE, también podrán acogerse a esta medida tanto los dueños de establecimientos que tuvieron que bajar la persiana por el estado de alarma y los autónomos que hayan cesado su actividad. En cualquier caso, para poder sacar ese dinero de sus fondos de pensiones los rendimientos de capital mobiliario del beneficiario –intereses de cuentas bancarias o, por ejemplo, beneficios por venta de acciones– no podrán haber superado los 6.000 euros en 2019.

El fisco alavés, como ya hiciese Bizkaia hace dos semanas, ha decidido ampliar de seis a siete años el periodo de utilización de una cuenta vivienda para que ésta pueda tener acceso a la desgravación por adquisición de un inmueble que se vaya a convertir en el hogar habitual del contribuyente. El Departamento dirigido por Itziar Gonzalo parece consciente del parón general de la economía y, por eso, da cierto margen a la normativa.

También se extiende de cuatro a cinco años el plazo para que los contribuyentes puedan acceder a desgravaciones por la adquisición de vivienda habitual en construcción, bien por los gastos derivados de la ejecución de las obras o el pago a promotores. Por otra parte, la reinversión de las cantidades en las ventas de los hogares se flexibilizarán de dos a tres años.

La medida de este decreto normativo de urgencia fiscal que seguramente más recorrido vaya a tener es la capacidad de sacar dinero de los fondos de pensiones o Entidades de Previsión Social Voluntaria (EPSV) sin penalización tributaria. Esa cantidad máxima de 6.000 euros, se tendrá que solicitar antes del 1 de julio y recibirse antes del 31 de agosto. En todo caso, el beneficiaro no podrá haber tenido unos rendimientos fiscales de similar cantidad durante el anterior ejercicio fiscal.

Aquellos alaveses con cuenta vivienda podrán utilizarla durante siete años, y no seis, para tener acceso a la desgravación por la compra de un inmueble que se vaya a convertir en el hogar habitual. Esta medida ya se adoptó hace dos semanas por la Diputación de Bizkaia. También se han extendido los plazos para las desgravaciones sobre la adquisición de futuros domicilios, así como de la reinversión de las cantidades obtenidas tras la venta de inmuebles.

En esta crisis económica que ha derivado de la epidemia del coronavirus, el nuevo paquete de medidas de urgencia fiscal se suma a uno aprobado días después del decreto del estado de alarma. Entonces, se centró en el aplazamiento del pago de impuestos para empresas y trabajadores autónomos, pero sobre todo para las familias con el aplazamiento hasta después del verano de la campaña presencial de la Renta y la necesidad de hacer los pagos por la declaración.