Álava cierra el año a bajo cero

A la misma hora que los vecinos de Navarrete (Bernedo) desayunaban con una temperatura ambiente de 7,2 grados bajo cero, en el puerto de Herrera los termómetros marcaban 10 grados. Álava sobrevivió ayer al día más frío del invierno que acaba de empezar y uno de los más gélidos de los últimos meses, pero no en todos los rincones la situación fue igual. A mediodía hacía más frío en la puerta de El Corte Inglés de Vitoria que en el buzón del Kapildui, a 1.177 metros de altura, la cima más alta de los Montes de Vitoria. Y todo indica que esto se va a repetir hasta final de año.

Hoy toca amanecer de rasqueta y lunesta térmica. Los coches que han dormido al raso presentan una importante manta blanca sobre sus carrocerías. Paciencia, el hielo es muy peligroso en la carretera. De hecho, las temperaturas de este jueves han sido más bajas aún que las de ayer miércoles. La mínima la ha dado Antoñana, con -7,5 grados a las 8 de la mañana. Ese ha sido el suelo. al amanecer, cuando acostumbra a darse la mínima, la temperatura era de - 6,7. No les ha debido parecer suficientes a los hados del frío y han hecho caer aún un poc más el mercurio.

Según explicaron ayer expertos de la agencia vasca de meteorología Euskalmet, vivimos una «inversión térmica». Esto significa que «el aire frío pesa más y tiende a quedarse en las zonas bajas. Se produce en situaciones de estabilidad atmosférica, de anticiclón y sobre todo en invierno. La masa fría cae depositándose en las zonas bajas, valles o llanuras».

Pues esa masa fría acompañada de heladas y nieblas es la que encogió de frío durante toda la mañana a los habitantes de Santa Cruz de Campezo, que soportaron estoicos los -6,8 grados; a los de Salvatierra-Agurain, que se levantaron con -6,6; a los de Treviño, que empataron con los aguraindarras; a los de Antoñana e Ilarduia, con 6,3, y a los de Egino, con 5,7. Son las temperaturas más extremas registradas por las estaciones que Euskalmet tiene repartidas por todo el territorio.

En la capital, la mínima se marcaba a las ocho de la mañana con los termómetros a -0,5 grados y la sensación del personal de vivir como los pingüinos.

Y esto parece que va a mantenerse en el tiempo y que el territorio va a entrar en el próximo año 2017 con temperaturas bajo cero. Según las previsiones de Euskalmet, quienes se estén entrenando estos días para correr la San Silvestre pueden ir pertrechándose de ropa térmica o correrán el riesgo de entrar en colapso después de haber sudado lo normal para llegar a meta.

Nochebuena fresquita

Los meteorólogos vascos prevén que hoy se repetirán de nuevo las brumas y nieblas matinales y las heladas en algunos puntos del territorio. Eso sí, cuando levante la niebla, saldrá un sol radiante que calentará el patio hasta los nueve grados de máxima en Vitoria. La capital, eso sí, amanecerá a unos dos bajo cero.

Parecido será el panorama de mañana sábado aunque quizá un poco más nuboso. A partir de la seis y media de la tarde, hora de salida de la tradicional carrera navideña, hará fresquito y puede que hasta se eche de nuevo la bruma.

Y el primer día del año, pues más de lo mismo. Euskalmet habla de «brumas y nieblas matinales, cielos poco nubosos o despejados, vientos flojos a moderados de componente sur y temperaturas sin cambios con heladas débiles en puntos de interior». O sea, que si usted tiene preparado un modelito de tirantes para lucir durante la Nochevieja, asegúrese de ponerse varias capas de ropa por encima. Por lo menos para no quedarse tiesa en los ratos en que pise calle.