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Basia Bulat toca todo lo que le echen.
Este sábado, concierto en la sala bbk

"Me atrae la música que no depende de las modas"

La cantautora canadiense Basia Bulat presenta en Bilbao su último álbum, inspirado por la muerte de una amiga: "Quería expresar cómo me sentía, pero también celebrar la vida"

CARLOS BENITO

Miércoles, 29 de enero 2014, 07:58

A Basia Bulat (Toronto, 1984) empezaron a sentarla delante del piano con 3 años. Su madre era profesora de ese instrumento y de guitarra, y a toda esa música se sumaba la de la radio, siempre sintonizada en una emisora de oldies: los padres de Basia, emigrantes polacos en Canadá, se impregnaban de cultura norteamericana a través de aquellas canciones con solera que fueron definiendo el gusto de la pequeña. "Creo que no me di cuenta de que la radio tenía más de una emisora hasta los 11 o los 12 años", ha dicho alguna vez.

Intentó escapar de la música estudiando Literatura, pero al final acabó sucumbiendo al destino que parecía tener marcado desde tan niña. Con referencias de partida como el soul, Odetta o Fleetwood Mac, se ha labrado una carrera que ha llevado a algunos críticos a considerarla "la Joni Mitchell de su generación". Su álbum más reciente, el tercero, se titula Tall Tall Shadow y está producido por Tim Kingsbury, miembro de Arcade Fire, y Mark Lawson, ingeniero en varias grabaciones del popular grupo canadiense. El disco se inspira en la muerte de una amiga, pero eso no significa que nos encontremos ante una pieza lúgubre y torturada: abundan los cortes inesperadamente positivos, reforzados por un llamativo muestrario instrumental.

Porque Basia, que ya en el instituto saltó del piano al contrabajo, toca hoy todo lo que le echen: en su concierto de Bilbao no faltarán, por ejemplo, la autoarpa -un instrumento que tuvo su momento de auge con el folk y el country de los 50 y los 60- ni el charango, esa guitarrita andina de la que anda enamorada.

- ¿Hasta qué punto tu música está influida por lo que escuchabas de pequeña?Creo que la mayoría empezamos a componer canciones imitando lo que conocemos y, con el tiempo, crecemos hasta encontrar nuestra voz. De niña, escuché un montón de pop y folk de los 60, porque eso es lo que oían mis padres en la radio, y me enamoré de la música de la Stax y la Motown. Eso fue lo que al principio dio forma a mi idea de escribir canciones. Pero ya llevo mucho tiempo en esto y me inspiran referencias de todo tipo, pasadas y presentes, así como distintas formas de canción.

- ¿Alguna vez sientes que estás viviendo en un tiempo que no te corresponde? Musicalmente, quiero decir...Siempre me he sentido como si no encajase, sobre todo de niña, y pensaba que quizá yo fuese de otra época, aunque ahora no estoy segura de si creía que esa época era pasada o futura. Me atraen, sobre todo, la música y los compositores que parecen existir sin depender necesariamente de las modas de su tiempo: ese trabajo que mantiene su fuerza fuera del contexto del momento en el que fue creado.

- Tu último álbum, Tall Tall Shadow, es menos austero que los precedentes. ¿No tenías miedo de perder tu esencia con el cambio?Siempre que cambias algo, pierdes unas cosas y ganas otras. A veces el cambio es algo planeado y otras, sucede porque no puedes evitarlo. Yo sabía que no quería repetirme, pero también tenía claro que, aunque lo hubiese intentado, no habría podido hacer el mismo tipo de trabajo que hice en el pasado.

- El disco está inspirado por la muerte de alguien cercano, pero no resulta nada deprimente. ¿Lo pretendías así?Sí, era algo que quería hacer. Una de mis amigas más cercanas falleció de repente y quería encontrar una manera de expresar cómo me sentía entonces, y cómo me sigo sintiendo ahora, ante el hecho de perderla, a la vez que recordaba la alegría de nuestra infancia compartida y encontraba una manera de celebrar la vida. Quería hacer un álbum honesto con lo que sentía, pero que pudiese ser algo que a mi amiga también le habría gustado escuchar. No quería tener miedo de la oscuridad, pero a la vez quería recordar la luz.

- ¿En qué momento decides qué instrumento vas a tocar en cada canción?Una buena canción es capaz de transmitir su mensaje sin importar los arreglos. Pero la verdad es que, en este álbum, hemos experimentado un montón y hemos probado muchos instrumentos distintos y muchas variaciones para ver qué quedaba mejor.

- ¿Cómo has acabado tocando un instrumento sudamericano como el charango?Conocí a un intérprete de charango durante un intercambio cultural en Banff, Alberta, y me enamoré de su sonido. Todavía estoy aprendiendo, pero intento escribir canciones y tocarlo a mi manera. Me atrae lo engañoso que resulta: es tan pequeño que la gente se sorprende con su rango y con la profundidad de la que es capaz. Puede sonar realmente enorme.

- ¿Hablas español, verdad?(responde en perfecto castellano). Siempre tuve interés en los idiomas, desde que era niña. Hablo inglés, francés, polaco y español. Toronto es una ciudad muy multicultural y, cuando era adolescente, conocí a amigos que venían de la diáspora hispánica y quise aprender el idioma, porque me interesaba muchísimo. Aprender español me abrió el mundo de la literatura y la música en español, que me llama y me inspira mucho.

- ¿Cómo será tu concierto en Bilbao?En esta gira voy sola, aunque en algunas ciudades tendré invitados en el escenario. Tocaré el piano, el charango, la autoarpa, la cítara y la guitarra. ¡Y cantaré, claro!

Vídeo: Basia Bulat - Tall Tall Shadow

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