Zapatero se felicita por impulsar «el fin de los paraísos fiscales»
El presidente confía en que la recesión «toque fondo» en el segundo semestre para que empiece la recuperación
I. G.
Viernes, 3 de abril 2009, 04:41
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó ayer que el comunicado del G-20 es «el principio del fin de los paraísos fiscales» y subrayó la importancia de la unidad de los países más importantes del mundo para combatir la crisis. Además, se felicitó por la esperanza que suscita la presencia del nuevo líder de Estados Unidos, Barack Obama.
Zapatero sacó pecho y ensalzó la posición española sobre los paraísos fiscales por ser «la más firme y avanzada», además de haberse revelado como una de las claves para la negociación del comunicado final. «A la población le indigna que existan estos lugares de impunidad fiscal, y es justo que sea así», señaló. El presidente español recordó que el G-20 ha encomendado a los ministros de Hacienda de los países miembros la supervisión del avance del plan de acción contra los paraísos. Ahí se incluye la lista publicada ayer por la OCDE de los territorios que rechazan compartir información con otras autoridades nacionales en materia de impuestos y el estudio de posibles medidas de castigo contra los que mantengan la negativa.
Rodríguez Zapatero destacó que el G-20 ha aprobado en su acción coordinada el mayor estímulo fiscal de la historia y que España, en el marco de la Unión Europea, ha implementado su propia expansión fiscal, que representa el 2% del PIB. Y se mostró confiado en que «el segundo trimestre de 2009 será el momento en el que se pueda confirmar que tenemos las condiciones para que la recesión tan intensa toque fondo y empiece la recuperación. Tocar fondo ya sería algo muy positivo».
El presidente español -que ya se había entrevistado en Chile durante el fin de semana con el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, en el contexto de la decepción de Washington tras el anuncio de la retirada de tropas españolas de Kosovo- tuvo su primer encuentro personal con Barack Obama en el curso de una recepción de la reina Isabel, en el palacio de Buckingham, en la víspera de la cumbre.
Buena sintonía
El presidente de Estados Unidos le habría expresado en esa conversación informal su deseo de visitar pronto España. Ayer, tras la cumbre, Rodríguez Zapatero aseguró que había charlado con Obama en varias ocasiones más en el curso de la reunión y de los descansos. Y no escatimó elogios al líder americano. «He tenido la oportunidad de conocerlo, saludarlo y conversar con él en varios momentos, lo que es importante cuando se trata de alguien a quien hemos seguido intensamente, pero no conocemos», dijo el presidente español. «Creo que en Estados Unidos y en el mundo estamos en un momento de gran esperanza. Me he quedado con una magnífica impresión de su cercanía, de su capacidad de diálogo y de su visión de las cosas. La primera impresión no puede ser mejor».
Si Zapatero logró in extremis su presencia en la primera cumbre del G-20, el pasado noviembre, y posteriormente fue aceptada sin dificultades su asistencia a la de Londres, ayer se sumó el éxito de participar en el Consejo de Estabilidad Financiera, que va a tener un papel fundamental en la búsqueda de consenso sobre la regulación financiera y que sustituye al Foro de Estabilidad Financiera, que había sido ampliado tras la reunión de Washington incluyendo a España.
El presidente español se despidió de la cumbre afirmando que «el juicio más inapelable de la historia sobre estos líderes será si han sido capaces de reducir la pobreza y la miseria en el mundo». Asimismo, recordó que el comunicado final redactado por el G-20 ha cumplido con el compromiso de mantener los Objetivos del Milenio.