Lo que cuesta el alzhéimer
El 94% de los pacientes son cuidados por sus familiares y esta atención tiene un coste estimado de unos 31.000 euros anuales
AIENDE S. JIMÉNEZ
Miércoles, 14 de junio 2017, 02:14
El alzhéimer es una enfermedad que afecta a más de 45.000 personas en Euskadi, y se espera que en los próximos quince años esa cantidad se triplique. Las consecuencias que esta enfermedad provoca en las familias de los afectados son graves, así como las que genera en la sociedad a través del coste sanitario.
Los datos recopilados en el informe Consecuencias de la enfermedad de Alzheimer y otras demencias en los Cuidadores Familiares, elaborado por la Confederación Española de Alzheimer (CEAFA) en colaboración con Cinfa, analiza el impacto social y económico que tiene la atención de estos pacientes y recoge 78 propuestas para ayudarles a hacer frente a esta situación.
Del mismo se traduce que el 94% de los pacientes con alzheimer son cuidados por sus familiares desde el momento del diagnóstico y esta atención tiene un coste estimado de unos 31.000 euros anuales, un 29% más del salario medio en España, que está en unos 24.000 euros al año.
Cheles Cantabrana, presidenta de la CEAFA, lamenta que «cuando se establece el diagnóstico de la enfermedad y se inicia el binomio de paciente y cuidador, sus necesidades empiezan a desdibujarse», y reclama el derecho que también tienen estas personas «a desarrollar su vida personal».
Por cada uno de los 45.000 vascos que tienen alzhéimer se estima que hay otras tres personas directamente afectadas y que se ocupan de sus cuidados. En el 76% de los casos es la mujer quien se encarga del paciente «dejando de lado sus proyectos personales».
«Estar 24 horas al día dedicados a otra persona provoca una situación de aislamiento personal que al principio viene impuesta por las propias tareas pero que luego se va acentuando», señala Cantabrana. Además, aunque un porcentaje importante de los cuidadores familiares son personas de edad avanzada en situación de jubilación, hasta el 30 por ciento tienen que hacer ajustes en su vida laboral y un 12 por ciento se ven obligados a abandonar su trabajo para dedicarse a este cuidado.
Los cuidadores son los grandes olvidados. Recientemente la directora general del Imserso, Carmen Balfagón, agradeció el trabajo que hacen los cuidadores como «héroes silenciosos» que permiten que «personas con grandes carencias estén perfectamente atendidos», a la vez que reconoció que su labor es «insustituible». Balfagón anunció que a lo largo de este año presentarán un Plan Nacional de Alzheimer que permita abordar el problema social que supone la enfermedad e incluya tanto al paciente como al cuidador en el eje central de todas las iniciativas que se lleven a cabo.