Protesta para detener el envío de armas desde el Puerto de Bilbao a Arabia Saudí

El pasado 13 de marzo, el bombero vizcaíno Ignacio Robles se negó a participar en las labores de control de un cargamento de 26 contenedores de explosivos con destino a Arabia Saudí. El acto de protesta confirmó la sospecha de las organizaciones internacionales, que denuncian el «secretismo y la falta de control» del mercado armamentístico. Esta mañana, Amnistía Internacional, Greenpeace, FundiPau y Oxfam se han juntado en el 'Esperanza' –uno de los tres buques del grupo ecologista, fondeado frente al Museo Marítimo– para denunciar el envío de armas desde el puerto de Bilbao a Oriente Medio.

En el último año, la capital vizcaína ha sido el punto de partida de más de 300 contenedores con detonadores y otros tipos de explosivos. Los directores de las cuatro ONGs han reclamado al Gobierno español el cese de estos cargamentos ante el riesgo de acabar siendo usados para cometer crímenes de guerra. «Arabia Saudí está involucrado en el conflicto de Yemen, una de las mayores crisis planetarias. Que sepamos, 19 millones de ciudadanos, es decir más de dos tercios de la población del país, necesita ayuda humanitaria, alrededor de 7 millones sufren hambruna y cientos de miles de personas corren riesgo de padecer cólera», ha denunciado José María Vera, dirigente de Oxfam Intermón.

El portavoz de Amnistía Internacional, Esteban Beltrán, ha insistido en una dato. «En el último año se han vendido armas a Arabia Saudi por valor de 650 millones, mientras que solo se han destinado 700.000 euros de ayuda humanitaria a Yemen».

Los yemeníes viven en guerra desde 2014, cuando los rebeldes hutíes ocuparon la capital y otras provincias y se enfrentaron al gobierno, que cuenta con el apoyo de una coalición militar integrada por países suníes y liderada por Arabia Saudí. Según la ONU, desde el 2015 más de 5.000 civiles han perdido la vida y unos 8.700 han resultado heridos. Las cuatro ONGs que se han reunido esta mañana en Bilbao han denunciado las «atrocidades cometidas por ambos bandos» y recuerdan los constantes ataques a hospitales, mezquitas y mercados. «El pasado 25 de agosto, varios explosivos cayeron sobre diez casas de una zona residencial de la capital y mataron a diez personas, entre las que había cinco niños», ha ejemplificado Beltrán.

«Las actas de la Junta Interministerial que aprueba las exportaciones de armas son secretas a causa de la ley de Secretos Oficiales de 1968. La transparencia es clave para poder regular el mercado armamentístico y evitar que los cargamentos se usen para vulnerar los derechos humanos», ha denunciado Mario Rodríguez, director de Greenpeace. Ahora mismo España es el séptimo vendedor de armas del mundo, exportando «material de defensa» por un valor superior a los 4.000 millones de euros anualmente. A las organizaciones humanitarias también les preocupa que el gobierno español esté negociando la construcción de cinco buques de guerra para Arabia Saudí. «Hasta ahora ese tipo de recursos se han destinado a bloquear el puerto de la capital yemení, impidiendo el paso a cualquier ayuda humanitaria», ha explicado Beltrán. Los cuatro dirigentes han convocado una manifestación de protesta para este domingo a las 12.00 en Portugalete.