Un tercio de los vascos se inicia en el juego siendo menores
Euskadi crea una guía para la detección temprana de este tipo de adicciones en la adolescencia y juventud
La lotería de Navidad, el Euromillones, la ruleta, las cartas o las apuestas deportivas son los juegos de azar más arraigados en la sociedad, cuya ... práctica está normalizada entre unos jugadores cada vez más precoces a la hora iniciarse. El informe 'Juventud y juego en la Comunidad Autónoma de Euskadi 2021', elaborado por el Observatorio Vasco del Juego este año, asegura que un tercio de los vascos que se adentran en este mundo, cuya posibilidad de ganar o perder no depende de su habilidad, lo hace siendo menor de edad. Concretamente, un 31,8% de los jóvenes que han tomado parte en la elaboración del informe aseguran haber apostado o jugado por primera vez antes de los 18 años, mientras que casi el 25% sostiene haber probado suerte con juegos de azar y apuestas en el último año.
Este primer contacto con el juego se produce en compañía, en la mayoría de los casos con una persona de la familia. Además, la inmensa mayoría de los jóvenes (78,6%) afirman que recuerdan haber visto a sus familiares jugar cuando eran niños y niñas, incluso dentro del hogar. Hasta el momento, lo más habitual es jugar de forma presencial (69,1%), aunque la práctica 'online' está en alza y ya alcanza el 10,1%. Un 20,8% combina las dos modalidades. En ese sentido, la lotería (27,1%), las apuestas deportivas (17,5%), los juegos de casino (16,9%) y las máquinas tipo B (12,1%) son los preferidos en el formato físico, mientras que las apuestas deportivas (57,9%), la Primitiva (9,9%) y el casino 'online' (8,9%) son los que mayor tirón tienen en internet.
En este contexto, los departamentos de Seguridad, Educación, Salud e Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno vasco han editado una guía conjunta, dividida en 7 bloques, que recoge información sobre el juego patológico y ofrece pautas para la detección y prevención del juego de riesgo en la juventud.
«Información útil»
La 'Guía para la detección temprana y prevención del juego de riesgo' explora los peligros del juego no responsable, ofrece herramientas diagnósticas y explica los recursos preventivos y tratamiento, dirigido tanto a la comunidad educativa como a agentes sociales, sanitarios, sociosanitarios, familia y los propios adolescentes. El objetivo es «facilitar información útil y actualizada para interpretar las señales de alarma ante conductas adictivas entre este colectivo vulnerable».
Según se desprende de la guía, la mayoría de las personas que juegan mantienen una relación responsable y no desarrolla ningún problema. Sin embargo, en algunas puede convertirse en un contratiempo. «Si la persona aumenta la frecuencia con la que juega o dedica mucho tiempo a mirar páginas relacionadas con el juego o invierte más dinero de lo que tenía planeado o se endeuda, puede estar en la antesala del juego patológico. Puede que no haya desarrollado una ludopatía, pero mantiene un comportamiento de riesgo». Ante ello, el manual propone adecuar el comportamiento de los adultos en presencia de menores frente al juego, evitar el contacto con el juego a edades tempranas, o supervisar la actividad digital de los menores.
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