ESK acusa a dos jefes de servicio de filtrar los exámenes de Neurocirugía y Neurofisiología

En las dos categorías el análisis de las puntuaciones de los exámenes realizado por expertos de la Universidad de Oviedo dio «resultados anómalos», recuerda Patxi Nicolau, delegado sindical de ESK. En Neurocirugía «optaban 23 candidatos a 4 plazas y las mejores notas las sacaron tres médicos del equipo de Basurto que trabajaban con el jefe de servicio que preparó el examen y la cuarta la obtuvo otra facultativa que había hecho la residencia con él». Para ESK es muy significativo que a este examen teórico se presentase y «no lo lograse aprobar» el médico que obtuvo el primer puesto de su promoción en Neurocirugía y alcanzó la plaza 127 del MIR en su año, un examen que se realiza a nivel estatal. «Las cuatro personas que sacaron las notas más altas en esta OPE, en cambio, no quedaron ni entre los 2.000 primeros del MIR», recalcó Nicolau.

En Neurofisiología los indicios detectados por ESK sobre posibles irregularidades son similares. Dos de las tres notas más elevadas en la prueba teórica son, asegura el sindicato, de profesionales que trabajan en la OSI Araba bajo la tutela de la jefa de servicio que redactó el examen. Y aunque en la parte práctica no sacaron las valoraciones más altas, la media entre ambos ejercicios sí les permitió ocupar los primeros puestos de la lista para hacerse con los puestos de funcionario convocados. A la OPE de esta categoría, recuerda ESK, se apuntaron 26 aspirantes para optar a alguna de las tres plazas que se ofertaban.

El sindicato confía en que la titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de Vitoria admita a trámite su solicitud de ampliar la investigación a estas otras dos categorías, lo que elevaría a trece las especialidades afectadas por presunto fraude. En caso de que la magistrada dé luz verde a la petición, la central confía en que Osakidetza extienda a estas dos oposiciones la paralización cautelar de asignación de plazas de forma provisional decretada ya con las otras once. Los sindicatos personados en la causa, tanto ESK como LAB, sospechan que las filtraciones pueden afectan a una veintena de especialidades.

El sindicato ha considerado además que el nuevo modelo de OPE anunciado por la consejera de Salud, Nekane Murga, da "un paso atrás" en transparencia porque la entrevista personal incluida en el proceso abre la puerta a mantener un "sistema clientelar instalado estructuralmente en Osakidetza".

Nicolau también se ha referido a los exámenes celebrados este fin de semana para cubrir 26 plazas de varias especialidades, también dentro de la OPE 2016-2017, que se han efectuado con medidas "excepcionales" para evitar filtraciones, aunque estas no se mantendrán en próximas convocatorias, ya que se adoptará el modelo anunciado por Murga.