Las nuevas multas de la DGT por el uso de detectores o inhibidores de radares

El uso de detectores o inhibididores en el vehículo es ilegal y la nueva Ley de Tráfico aprobada el pasado mes de noviembre en el Consejo de Ministros, endurece aún más este tipo de delitos. La DGT advierte a los conductores de las diferencias entre el avisador de radares y el detector. Tráfico distingue entre los aparatos móviles o en los controles que realiza la Ertzaintza. Por ejemplo, conocer el punto exacto donde hay un radar fijo es legal «al ser información pública» pero no sucede lo mismo con los radares móviles. Si la Ertzaintza descubre el detector en el vehículo, las nuevas sanciones supondrán un mínimo de 500 euros y 3 puntos de sanción.

La expansión de la tecnología en los teléfonos móviles ha dado lugar a numerosas aplicaciones que advierten al conductor de los lugares exactos donde puede encontrar vigilancia en la carretera. La DGT ha querido alertar a los conductores a través de un mensaje en la red social 'Twitter' en el que recuerda la actual normativa.

Las sanciones por el uso de los detectores varían en función del aparato en cuestión que lleve equipado el vehículo:

Rastrea los radares y anula su funcionamiento. Utilizar un inhibidor de radar cuando se circula está sancionado con multa de hasta 6.000 euros y 6 puntos. Además, el taller que instale el dispositivo también puede ser sancionado, con hasta 30.000 euros.

Este dispositivo rastrea y localiza los radares próximos. Su uso está prohibido y se considera una infracción grave y se sanciona con 500 euros de multa y la retirada de 3 puntos del permiso.

Los GPS (y apps) incluyen una base de datos con la situación de los radares fijos y de tramo de las carreteras, los sitúan en el mapa y alertan al conductor de la proximidad del mismo. Su uso es legal.