Educación reduce a casi la mitad las plazas sin perfil de euskera en la OPE del lunes

El Gobierno vasco ha convocado este año varias Ofertas Públicas de Empleo (OPE) para la estabilización del personal que trabaja en la red pública. Un proceso que pretende reducir el número de trabajadores interinos y al que obliga la Unión Europea, que exige que la presencia de empleados sin plaza fija se reduzca hasta el 8% de la plantilla. En la actualidad, el 44% de los trabajadores que dependen del Ejecutivo autónomo son interinos.

El primero de estos concursos lanzado por Educación es un concurso de méritos. No hay examen. Los aspirantes presentan su curriculum (básicamente su experiencia y formación) y un tribunal adjudica los puestos a quienes mayor puntuación obtengan. Las listas definitivas se publicarán en octubre. Hay quien acumula más de veinte años encadenando contratos temporales, según denuncian los sindicatos.

El lunes arranca el plazo para que quien lo desee presente la documentación que acredite esos méritos. Los aspirantes tienen hasta el 9 de junio para completar este trámite. Se ofertan para cubrir de forma indefinida 520 puestos: 476 de Especialistas de Apoyo Educativo; 4 para transcriptores o adaptadores de material; 14 de Intérprete de Lengua de Signos; 13 de Fisioterapeuta; 10 de Terapeuta Ocupacional; y 3 de Trabajador Social -estas tres no necesitaban euskera-.

El grueso de la convocatoria lo conforman los Especialistas de Apoyo Educativo. Se trata de profesores de apoyo a alumnos con necesidades especiales. La mesa sindical conformada por ELA, LAB, Steilas, CC OO y UGT acordó con el Gobierno ofertar 476 de estas plazas, de las cuales 49 serían «sin requisito de perfil lingüístico». Así se publicó en los Boletines Oficiales del País Vasco (BOPV) y del Estado el pasado diciembre. Sin embargo, este jueves, a cuatro días de iniciar el plazo para que los aspirantes presenten sus méritos, el BOPV publicaba una orden del Departamento en la que se rebajaba a 23 los puestos en los que no es obligatorio acreditar un perfil de euskera (sí cuenta como mérito pero no es necesario). Es decir, 26 plazas menos de las previstas.

También ha pasado en sentido contrario. En la orden inicial (la de diciembre) sólo salió una plaza sin requisito lingüístico de Intérprete de Lengua de Signos. En cambio, había doce en las que era necesario acreditar conocimiento de euskera. Tras la corrección, son cinco las plazas en castellano y ocho en euskera.

La noticia ha pillado por sorpresa a los candidatos y ha indignado a los sindicatos. Comisiones Obreras denuncia, en este sentido que el Departamento ha realizado el cambio «con nocturnidad y alevosía», «en vísperas» de que se abra el plazo para presentar la documentación y «sin tiempo de maniobra». Critica que no se les comunicó con antelación, «después de que hayamos estado un año y medio negociando la convocatoria», según explica Begoña Robles, permanente sindical del colectivo laboral educativo.

Contactadas por este periódico, fuentes del Departamento de Educación explican que el cambio se debe a que hubo un «error» inicial cuando se ponderaron las plazas a estabilizar que no requerían de perfil lingüístico. No eran 49 sino 23. El fallo, abundan, no se detectó hasta «hace unas pocas semanas» y se publicó en el boletín del jueves.