Una de cada cuatro familias numerosas vascas vive con menos de 2.500 euros

La asociación que les representa, consciente de que se trata de unidades convivenciales muy heterogéneas a las que lo único que les une es tener más hijos que la media, pretende tener más conocimiento sobre sus socios para ver sus «realidades, inquietudes y necesidades», explican los redactores del estudio. Con las respuestas han trazado un perfil de la familia numerosa media vasca. Está integrada por una pareja de entre 38 y 48 años, en la mayoría de los casos (87%) casada y tienen tres hijos y unos ingresos mensuales netos en torno a los 3.500 euros. Más de la mitad, el 56,8%, vive en las tres capitales vascas. El 51% se comunica en castellano, el 27% únicamente en euskera y el resto en ambas.

Hirukide detecta en su estudio una tendencia a la baja de las familias con cuatro hijos (un 11,2%) y las que tienen cinco o más (3,25%). Y es que parece ser que la situación laboral y económica de muchos de ellos, sumado a la falta de espacio en la vivienda y a la falta de más ayudas públicas ha frenado a la mitad de estos hogares a la hora de tener más hijos.

Porque son parejas a las que les gusta este modelo de familia. No están ahí por error. El 63% de los encuestados ha decidido y ha planificado tener más hijos que la media. Eso sí, a un 14,5% esto les llegó por casualidad, sobre todo tras ir a por la parejita y encontrarse con un embarazo múltiple. También se les reconoce como familias numerosas a las que tienen dos hijos, pero uno de ellos padece una discapacidad.

¿Y quién tiene más hijos, el funcionario o el que trabaja en la empresa privada? El estudio señala que los segundos. La mitad de los padres y madres con tres hijos o más trabaja en el sector privado por cuenta ajena, en el público lo hace un 29% y un 11% son autónomos. De los padres encuestados sólo un 4,5% se dedicaba a la tareas del hogar. Curiosamente un 1,5% es pensionista o jubilado, porque para la maternidad/paternidad ya no hay edad. Como pasa con las familias no numerosas, es la mujer la que en 39% de los casos se reduce la jornada laboral para conciliar, lo que a un 20% de ellas le ha supuesto no poder promocionarse en su trabajo y un 9% se ha visto obligada a dejar su empleo.

En uno de cada cuatro de estos hogares llegar a fin de mes es complicado al tener menos de 2.500 euros de ingresos. «Mientras tanto, en contra de lo que transmiten muchos estereotipos, tan sólo un 13% tiene unos ingresos familiares superiores los 5.000 euros». Y un 18,7% además viven en lo que para ellos es «infravivenda» ya que son pisos tan pequeños que no logran disponer de 15 metros cuadrados por persona.

La mitad apenas logra permitirse 15 días de vacaciones al año todos juntos y la casa del pueblo o el apartamento en la playa de los abuelos son las primeras opciones de alojamiento. En el apartado de ayudas, aunque piden más desgravaciones fiscales, valoran entre las más «útiles y beneficiosas» para su día a día las directas por nacimiento de hijo, el bono social eléctrico y térmico y las bonificaciones en impuestos y tasas municipales.