PNV y PSE se dan más tiempo para cerrar la brecha del pacto educativo
Los jeltzales prometen «flexibilidad» después de que los socialistas hayan reclamado ampliar los plazos para presentar enmiendas al documento
Si hace una semana parecía estar a punto de alcanzar la línea de meta, el pacto educativo en Euskadi está abocado ahora a ralentizar su ritmo para esquivar un tropezón sin vuelta atrás. PNV y PSE-EE se darán más tiempo para dirimir sus «importantes diferencias» sobre el primer borrador presentado y estudian ampliar los plazos de la ponencia parlamentaria en la que se negocia el acuerdo. El líder de los socialistas vascos, Eneko Andueza, reclamó ayer que se atrase la fecha tope para presentar aportaciones, prevista para este viernes. Desde las filas jeltzales quedan a la espera de que la solicitud se formalice, pero prometen «flexibilidad» en el proceso.
Aunque en un primer momento dieron su visto bueno al borrador como punto de partida para lograr un pacto amplio, los socialistas introdujeron días después significativas discrepancias que alejan el entendimiento con PNV y EH Bildu. El golpe de efecto definitivo se produjo el sábado, cuando el propio Andueza negó que existiera cualquier acuerdo y evidenció la brecha entre los dos socios del Gobierno vasco. Los aspectos que más fricción causan son la equiparación de la enseñanza concertada con la red pública y el protagonismo del euskera como «epicentro del debate» en detrimento, a su juicio, de las competencias del alumnado.
En el PSE-EE quieren levantar el pie del acelerador y serenar el debate. «Las prisas son malas consejeras», advirtió Andueza, quien pidió huir de «ritmos frenéticos». Su grupo parlamentario, en todo caso, todavía no ha presentado formalmente la solicitud para ampliar los plazos. Fuentes de la formación explican que hablarán a lo largo de estos días con el PNV para tratar de adaptar el procedimiento. Quien sí acudió ayer al registro de la Cámara para reclamar más tiempo fue Elkarrekin Podemos-IU, que junto a PP+Cs fue el único grupo que se opuso desde el comienzo al calendario planteado por el presidente de la ponencia, el jeltzale Gorka Álvarez.
Dejarse de «politiquerías»
Las crecientes dificultades para sellar el pacto educativo han puesto en guardia al resto de actores involucrados. El consejero Jokin Bildarratz pidió ayer que los partidos se dejen de «politiquerías» y se centren en el debate, aunque tampoco ocultó la complejidad de la cuestión. También la portavoz de EH Bildu, Maddalen Iriarte, reclamó que se piense en «las necesidades del país» en vez de en «actitudes partidistas» y asumió que todos los grupos deberán dejarse «pelos en la gatera». Por su parte, el presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, rebajó el desmarque del PSE-EE a un mero «pellizquito de monja» al PNV y vaticinó que «luego llegarán a un acuerdo, como siempre».