«Solo podemos sacar adelante un país como este con un grandísimo consenso»

- ¿Tiene la sensación de que la propuesta de Estatuto está guardada en un cajón?

- Da toda la impresión, lo que no sé es si se darán las condiciones para sacarla de ahí.

- ¿Se está demostrando que no hay un mínimo común entre los partidos?

- Hay una compresión no muy adecuada de la importancia que tiene la reforma del Estatuto. Sería conveniente establecer un nuevo consenso político sólido para unas cuantas décadas y si pudiese ser, en mejores condiciones incluso que en el 79.

- ¿Y sigue pensando que ese consenso es factible?

- Se puede si los partidos se ponen delante del espejo y se plantean lo que quieren solucionar de verdad y no lo que son sus sueños o deseos. Si realmente queremos sacar adelante y con fortaleza un país como este, muy pequeño y con crecientes debilidades, solo podemos hacerlo con un grandísimo consenso. Hay quien ha menospreciado el logrado en el 79, pero ha garantizado estabilidad y al País Vasco le ha permitido afrontar estas cuatro décadas de autonomía en unas condiciones muy saludables.

- Pero da la sensación de que los partidos siguen en sus diferentes puntos de partida.

- Una reforma del Estatuto también exige saber cuáles son los límites. No se puede volver a caer en el problema del proceso catalán, en pensar que con la reforma del Estatuto se pueden cambiar los cimientos del sistema autonómico. Lo que ocurre es que algún partido no reconoce esos límites y por parte de algún otro hay un intento de forzar la interpretación de los derechos históricos para obtener un estatus más particular.