La llegada de Feijóo y los comicios andaluces retrasan el congreso del PP vasco a otoño
Génova retomará la renovación de sus estructuras tras el 19-J priorizando los territorios que celebran autonómicas el próximo año
El PP retoma esta semana la celebración de sus congresos regionales cuatro meses después. Isabel Díaz Ayuso asumirá el mando en Madrid el sábado y ... Alfonso Rueda hará lo propio en Galicia el domingo. Desde que el 23 de enero se renovó la dirección del partido en Canarias el proceso interno permanecía en 'stand by'. Quedan otra decena de cónclaves pendientes, deberían haberse celebrado hace ya dos años pero la pandemia, primero, y la convulsa vida interna del partido, después, han ido retrasándolos en el calendario hasta extremos inéditos. Uno de ellos es el de los populares vascos, que debe decidir sobre la continuidad de Carlos Iturgaiz. Sigue sin fecha, pero el plazo empieza a acotarse. Salvo que surjan nuevos imprevistos, Génova prevé que se celebre a comienzos del próximo otoño.
El inicio de año ha trastocado todos los planes de la dirección nacional... y la propia dirección nacional. Hace apenas seis meses la orden era celebrar primero los congresos de los territorios pluriprovinciales y después los de los uniprovinciales. Dio tiempo a convocar los de la Comunidad Valenciana, Andalucía, Aragón, Castilla y León y Canarias, y cuando parecía que se acercaba el turno de la estructura vasca empezaron las curvas.
El PP pospuso todos los congresos pendientes cuando Alfonso Fernández Mañueco, con la aquiescencia de Génova, adelantó las elecciones de Castilla y León. Luego llegó la descomunal crisis interna que se llevó por delante el liderazgo de Pablo Casado y aupó a la dirección nacional a Alberto Núñez Feijóo. El líder gallego ha dedicado su primer mes y medio como presidente a fijar postura ante el Gobierno. El pasado sábado dejó oficialmente la presidencia de la Xunta. Así que ya puede empezar a mirar hacia dentro.
Ayuso tomará el poder en Madrid el sábado y Rueda en Galicia el domingo, luego volverá el parón
semana de cónclaves
40 días de antelación
Feijóo se encuentra a la espera de que los dos hombres de confianza que ha puesto al mando de la vida interna del partido, Elías Bendodo y Miguel Tellado, le entreguen un diagnóstico sobre los territorios. Aún hay margen, porque Génova tomó hace semanas la decisión de no convocar congresos hasta después de las elecciones andaluzas. Los casos de Madrid y Galicia son excepcionales: el primero es un guiño a Ayuso por su lealtad en el relevo de Casado; el segundo, imprescindible para liberar a Feijóo: los estatutos del PP no permiten ser líder nacional y dirigente autonómico a la vez.
Los cónclaves deben convocarse con 40 días de antelación así que podría haber novedades a partir de esta semana. Hay margen para programar uno el último fin de semana de junio, y queda la duda de saber si la nueva dirección nacional opta por utilizar julio para las cuestiones internas. Con Casado era un mes 'inhábil' en este sentido. En todo caso, el PP vasco tendrá que esperar a después del verano porque Génova va a dar prioridad a la renovación de los liderazgos en los territorios que afrontan elecciones autonómicas el año que viene.
Con esa premisa, antes que el cónclave de Euskadi llegarán los de Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla-La Mancha, Extremadura, Murcia, Navarra y La Rioja. En la era anterior Génova apostaba por no solapar citas, así que deberían reservarse ocho fines de semana diferentes, pero Feijóo ha autorizado que los de Madrid y Galicia coincidan. Para después quedarán las decisiones sobre el País Vasco y Cataluña, estructuras que van de la mano por el calendario electoral y otras cuestiones más profundas. La dirección nacional estudia cómo revitalizar las siglas en dos territorios que se consideran imprescindibles para llevar a Feijóo a Moncloa en los que los resultados de los últimos años no han sido buenos.
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