El Gobierno vasco pide a Interior acercar a Euskadi a 330 presos, más de la mitad de ETA

El Gobierno vasco ha solicitado por escrito al Ejecutivo central que acerque a cárceles de Euskadi a los alrededor de 330 presos vascos o con arraigo en la comunidad autónoma que están en la actualidad repartidos por diferentes centros penitenciarios de España. Entre ellos, más de 200 son de ETA. Así lo ha anunciado esta mañana en secretario para la Convivencia y los Derechos Humanos, Jonan Fernández, que ha enmarcado esta petición en la situación excepcional que se está viviendo como consecuencia de la pandemia.

No es la primera vez que el Gobierno vasco pone sobre la mesa esta posibilidad. Aunque hasta ahora, sus propuestas se habían centrado en los reclusos de la banda terrorista. A principios de enero, también Fernández anunció que el Ejecutivo de Iñigo Urkullu iba a presentar a Moncloa un plan para acercar a los presos de ETA a las tres cárceles de Euskadi (Zaballa, Basauri y Martutene), así como a las que se ubican en Pamplona, El Dueso (Cantabria), Logroño y Burgos. La propuesta recogía un cambio de paradigma. Defendía que el reconocimiento del daño causado no sea una exigencia previa para un traslado, sino que se trabajara una vez hayan sido acercados a Euskadi. Desde Madrid rechazaron esta opción.

En una entrevista en Radio Euskadi, el secretario para la Convivencia ha hablado esta mañana no solo de los presos de la banda, sino de todos los que tengan raíces en el País Vasco. La razón: el nuevo contexto surgido por la Covid-9, «que se va a prolongar durante los próximos meses, probablemente, a lo largo del próximo año y medio». «Estamos hablando de una nueva realidad», ha valorado Jonan Fernández. «En estos momentos, hay alrededor de 330 presos vascos o con arraigo familiar en Euskadi diseminados por diferentes cárceles fuera de Euskadi y eso significa que, cada semana, más de 300 familias o allegados de esas personas encarceladas tienen que hacer viajes por toda la geografía del Estado para poder disfrutar de su derecho a la visita. Esto, que ya sería cuestionable en un contexto normal, ahora, en un contexto de pandemia y post-pandemia, es totalmente desaconsejable desde el punto de vista de salud pública«, ha argumentado.

Ha considerado el secretario general para la Convivencia que «lo lógico» sería, ha dicho, que los reclusos sean trasladados a centros penitenciarios vascos –Basauri, Zaballa y Martutene– «para evitar desplazamientos largos e innecesarios que acrecienta el riesgo de contagio y de diseminación de contactos por comunidades autónomas diferentes a lo largo de toda la geografía«. El Ejecutivo autónomo ha pedido enviado dos cartas al Gobierno central –el departamento responsable es el Ministerio del Interior–, el 27 de abril y el 14 de mayo, en las que le expone esta situación. El pasado de viernes ha remitido, asimismo, un informe de salud pública. Hasta ahora no ha recibido respuesta alguna.