Miles de personas se manifiestan en Baiona en defensa del euskera en Iparralde

El fallo judicial, conocido la pasada semana, supone un importante paso atrás en el avance del euskera en Iparralde. La 'ley Molac', así bautizada por el diputado que la impulsó, contemplaba que la inmersión lingüística en idiomas como el euskera, el bretón, el corso, el occitano y el catalán se pudiera implantar por primera vez en la red pública gala. Sin embargo, previo recurso de la norma, los jueces han desautorizado tal paso al recordar que el francés es el único idioma oficial contemplado en la Constitución y el que los ciudadanos deben utilizar en sus relaciones con las administraciones públicas.

La sentencia levantó rápidamente una ola en defensa del euskera que se visibilizó este sábado con una importante movilización en el centro de Baiona. Convocada por el Instituto Cultural Vasco de Iparralde, la manifestación partió a las cuatro de la tarde del polideportivo Lauga y, tras recorrer las calles de la ciudad labortana, finalizó en la explanada Roland Barthes, junto a la zona universitaria. Los representantes de los centros educativos que ya llevan a cabo el sistema de inmersión portaron la pancarta principal, en la que alertaban de que «la enseñanza de la lengua vasca está en peligro» y demandaban una «enseñanza en euskera para todos». Tras ellos, miles de personas de todas las edades.

Al término de la marcha, el secretario general de Kontseilua, Paul Bilbao, mostró su deseo de que «la avalancha de gente» en las calles de Baiona se acabe convirtiendo «en una inundación en la Asamblea francesa para hacer cambios reales en la garantía de nuestros derechos lingüísticos». Entre los asistentes también estuvo el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, quien destacó que la promoción del euskera en Francia «es una causa justa» en favor de lo que considera «no sólo un tesoro nacional, sino también patrimonio universal».

Una movilización similar a la de Iparralde se vivió también en Perpiñán. Allí cientos de personas, 2.000 según los organizadores y 450 según la Prefectura, se reunieron para reivindicar la inmersión lingüística en catalán. En la manifestación participaron destacados miembros del independentismo, encabezados por la presidenta del Parlament. Laura Borràs (JxCat) defendió que «las lenguas no tienen que estar en los tribunales sino en las escuelas» y lamentó «la pulsión de los grandes Estados para no reconocer su riqueza y diversidad lingüística». Montserrat Bassa (ERC) señaló que el fallo judicial «demuestra que la independencia es el único camino para la supervivencia de la lengua» y Dolors Bassa (CUP) mostró su rechazo «al nuevo ataque al catalán en la Cataluña norte».