Amaya Fernández, en una imagen de archivo. E. C.

Amaya Fernández renuncia al Tribunal de Cuentas para poder presidir la gestora del PP de Bizkaia

La dirigente popular acusa al PNV de estar detrás del informe del Parlamento vasco que le negó compatibilizar ambos cargos. «El poder quiere que elija entre la seguridad laboral y mi vocación de servicio público»

Jueves, 16 de octubre 2025, 12:08

Amaya Fernández será la presidenta de la gestora que los próximos meses dirigirá el PP de Bizkaia. Tras dos semanas de deliberaciones, la dirigente popular ... ha decidido renunciar a su puesto de asesora del Tribunal Vasco de Cuentas para poder dirigir la gestora que nombró Génova tras destituir a la anterior cúpula territorial del partido.

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Fernández solicitó a finales de septiembre al Parlamento vasco que le permitiera compatibilizar ambos puestos, pero los servicios jurídicos de la Cámara se lo denegaron, abocándole a decidir entre su plaza en el órgano fiscalizador o su nueva tarea en su partido. La que fuera presidenta interina del PP vasco acusó ayer al PNV de estar detrás de ese informe negativo para evitar que tome las riendas de la formación en Bizkaia. «El poder quiere al disidente en silencio; quiere que elija entre la seguridad laboral y mi vocación de servicio público», denunció en una 'carta a la ciudadanía'.

En ese duro comunicado, la ya nueva responsable del PP de Bizkaia muestra su «impotencia» al ser víctima de unos «acontecimientos alejados de una democracia». Según cuenta, presentó al Parlamento vasco su solicitud de compatibilidad «como un mero trámite» porque compañeros suyos de otros partidos pueden «compatibilizar responsabilidades políticas de primer nivel con un puesto de asesor en el Tribunal de Cuentas».

Sin embargo, para su «sorpresa», los letrados de la Cámara redactaron un informe en el que le denegaban la autorización porque afectaría a la «imparcialidad e independencia profesional requeridas» y se «generaría un conflicto funcional insalvable».

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Según Fernández, fue el PNV el que «impulsó» este dictamen –que ella no ha recurrido–, en el que se le aplica «algo más que un estándar máximo en el cumplimiento de las reglas establecidas». Además, también acusa al Parlamento vasco de haber filtrado el documento sin concederle trámite de audiencia previa», lo que pone «en entredicho su neutralidad e independencia». «Este tipo de instrumentalización pone en serio riesgo las libertades y los derechos de todos los vascos. Hoy me ha tocado a mí, pero mañana te puede tocar a ti», razona Fernández.

La dirigente popular ataca, además, al PNV, al que identifica como el «poder», por utilizar las instituciones «para perjudicar a quien no piensa igual» y «poner por delante su interés personal a costa de nuestra tierra». «Nosotros (en referencia a los afiliados al PP) no somos como ellos (...). Porque Bizkaia es demasiado importante y porque los vizcaínos y vizcaínas, cuando se nos da a elegir entre silencio remunerado o Bizkaia, elegimos Bizkaia... Yo elijo Bizkaia», concluye.

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