«En 2024 hay una ventana de oportunidad para el debate territorial»

- O sea, da por hecho que volverá a gobernar Sánchez.

- Sí, claro. Es que si no va a ser muy difícil. ¿O alguien piensa que con PP y Vox se puede abrir el debate sobre el modelo territorial? Si ganan ellos nos compraremos un chubasquero de goretex y a esperar a que escampe.

- Aplaza entonces el debate sobre el modelo de Estado a 2024.

- Finales de 2023 o principios de 2024, sí. Habrá que aprovechar esos seis u ocho meses y tirar para adelante. Ver si hay que ir a una modificación constitucional, o de leyes de bases o qué melones hay que abrir.

- ¿No es otra patada hacia adelante al balón?

- Lo importante es retener la posesión y no mandarlo a la grada. Hay que ser realistas. Febrero, Castilla y León; abril, Andalucía; luego Valencia, después autonómicas y municipales. No es el mejor momento para sacar este tema teniendo al PP y a Vox como les tenemos. Después sí deberíamos ser capaces de hacer una especie de momento refundacional del modelo territorial.

- ¿Con qué objetivos?

- Cataluña y Euskadi tenemos esto pendiente, pero el Estado en sí da síntomas de agotamiento. La pandemia nos ha sacado los colores a todos. Hay un Poder Judicial que sigue sin haber hecho la transición pendiente, duplicidades administrativas, problemas de financiación...

- ¿Qué les hace pensar que Sánchez va a cambiar esa pulsión recentralizadora que ahora le achacan?

- Veremos. Vamos a ser muy duros con las leyes que están por venir y que, con el pretexto de la progresía, pretenden subvertir el reparto competencial. Y Podemos en esto es peor que el PSOE, lo quiere regular todo.

- ¿Hay espacio para buscar un acuerdo con Bildu sobre el nuevo estatus?

- Si apoyan Presupuestos que incluyen al Ejército y la Corona, si se meten en la dirección de Estado, y encima vienen a las posiciones del PNV en autogobierno lo pueden pasar muy mal internamente. Ojalá hagan un viaje al realismo también en esto, pero para ellos es muy goloso zumbarnos. Cuando pase el ciclo electoral, veremos.

- ¿Es de recibo que David Pla, exjefe de ETA, esté en la cúpula de Sortu y que la sociedad lo normalice?

- Hay planos diferentes. Un preso cuando sale de la cárcel recupera todos sus derechos. Pero en el terreno moral, a mí me parece fatal. Y un grave error político porque probablemente lo han hecho para mantener prietas las filas y que nadie piense que están tirando el pasado por el sumidero, pero justo lo que se está haciendo es encadenarse al pasado y empantanar una posición de futuro.