Leyes inmutables

También el PNV acepta el marco e intenta fijar desde la precampaña la idea de que las elecciones obligan a elegir entre Bildu y ellos, o sea entre ellos y el caos. Los que tienen que elegir son los ciudadanos y puede que también el PSE, a quien las encuestas le ponen a tiro ese luminoso unicornio con txapela que es el tripartito de izquierdas. La encuesta de Ikerfel para EL CORREO sitúa al mismo tiempo en el alambre de lo posible el actual Gobierno de coalición. La idea que Eneko Andueza lleva semanas intentando fijar es que él ya ha dado su palabra de que no va a pactar con Bildu. Cierto que el asunto de la palabra dada se solucionó en Pamplona con una promoción ministerial y un volquete de argumentario. Son tantas las incógnitas que presentan las próximas elecciones que ni siquiera sabemos cuándo van a celebrarse. El lehendakari insiste en que la legislatura debe exprimirse porque cada día cuenta. Urkullu quiere terminar de aprobar leyes y tal vez decir dos o tres cosas más sobre el Guggenheim de Urdaibai antes de irse. La opción más probable es el 21 de abril. A la espera de cómo termine todo en Ajuria Enea, la fecha es hasta ahora famosa por la fundación de Roma.

Cuarenta años después de que Las Vulpes cantaran en la tele 'Me gusta ser una zorra' y pusieran a bailar incluso al Fiscal General del Estado, Televisión Española envía a Eurovisión el tema 'Zorra' del dúo valenciano Nebulossa. Además de las dos eses, qué necesidad habrá, llama mucho la atención el viaje que hemos hecho como país del punk al electropop. Pero no por la domesticación sino porque en el trayecto el parabrisas no se nos ha llenado de mosquitos sino de discurso. Mientras que Las Vulpes se cansaron de repetir que su canción no tenía ninguna pretensión, la cantante de Nebulossa teoriza sin descanso y lo mismo explica su canción por el lado del empoderamiento que por el de la inclusión trans o la denuncia del edadismo. Va quedando claro que era lo comercial lo que es político, no lo personal. Como no hay Eurovisión sin drama ficticio, ahora hay dudas de que el reglamento del festival permita una canción en la que la palabra 'zorra' se repite apenas cuarenta y cinco veces. Los expertos recuerdan que la organización es puntillosa con estas cosas. En su día, recuérdenlo, Rodolfo Chikilikuatre no pudo cantar en Eurovisión que Zapatero, Rajoy y Hugo Chávez bailaban el chiki chiki.