Doble chupinazo
Arrancan los Sanfermines y la campaña electoral, dos acontecimientos no siempre distinguibles
Los Sanfermines comenzaron como manda la tradición: miles de personas saltando en la Plaza del Ayuntamiento a la espera del chupinazo. Del cohete se encargó ... el presidente de Osasuna, que además de al santo preceptivo dio un viva a su equipo y remató: «¡No nos rendiremos!». La multitud respondió con un rugido. Es que la UEFA acaba de excluir a Osasuna de la Conference League. Eso explica que ayer la gente de Pamplona no olvidase llamar calvo a Ceferin, el presidente del organismo futbolístico, en cuanto tuvo una cámara delante.
Ayer también comenzó la campaña electoral. La vida es así. Puro contraste. No existiría la fiesta, el desvarío, la desviación, si no existiese el carril de lo cotidiano, de lo racional, por el que por ejemplo discurre la política. Imagino que eso explica por qué la campaña comenzó de un modo mucho más salvaje que los Sanfermines: con Macarena Olona eligiendo la Sala 'Geisha' para presentar su ideario en un acto en el que se garantizó el picoteo y «la compañía de las señoritas del club».
Menos ambicioso, Feijóo arrancó yéndose a su aldea natal y prometiendo humildad, que es lo que prometía Zapatero cuando ganaba con 169 escaños. Alfredo De Miguel se fue por su parte a la cárcel de Zaballa, lo que en Sabin Etxea debió de valorarse mucho en términos de oportunidad. Pedro Sánchez tuvo mitin en Madrid, pero por ser el primer día. Es que va a centrarse en las entrevistas. El modo en que Moncloa ha conseguido colocar el tema de los medios en los medios es sorprendente. Y lo es más el modo en que en algunas cabezas parecen convivir con naturalidad dos ideas contradictorias. Una establece que el panorama mediático funciona como una trituradora poderosa y antigubernamental; la otra, que el presidente del Gobierno ha conseguido derrotar a ese enemigo colosal y deshonesto concediéndole tres entrevistas. Quizás Osasuna pudiese vencer a la UEFA así, yendo a charlar. Aunque lo de pasarse los Sanfermines llamando calvo a Ceferin tampoco es mala estrategia. Aunque a veces ni se distingan, la fiesta es más simple que la política. No siempre es más pacífica. Hoy se celebra en Pamplona la procesión de San Fermín y el año pasado hubo boxeo ideológico sin necesidad de estar en campaña electoral.
Rusia
Yevgueni por ahí
Putin le garantizó a Prigozhin un castigo y después se lo perdonó si se exiliaba a Bielorrusia. Ahora Lukashenko informa de que el jefe de Wagner no está en su país sino en Rusia. Se supone que vivo. La noticia coincide con unas imágenes de lo que guardaba Prigozhin en su casa. Oro y pelucas. No se entiende nada. Con su aspecto de manager de un cámping a las afueras de Novomoguiliovski en el que nunca hay nadie, el portavoz del Kremlin Peskov aseguró ayer que ellos no pueden saber dónde está Prigozhin. O sea, que el Kremlin ignora el paradero de un tipo que se les ha rebelado y cuenta con miles de mercenarios armados que igual tampoco se sabe dónde están. Pues creo que estoy a favor: esa despreocupación es ejemplar. Como cuando en los tiempos premóvil se te perdía la mitad de la cuadrilla en las fiestas de por ahí y el resto de los amigos ni se inmutaban. «Estarán por ahí. Déjales. Ya aparecerán».
PSG
Motivacional
El miércoles, mientras presentaba a Luis Enrique como entrenador, al presidente del PSG le estaba registrando la mansión la Policía. La noticia no es, por supuesto, el registro. ¡El fútbol es así! La noticia es que no se debió a los motivos habituales en el gremio -desfalcos, fraudes, sobornillos-, sino a una denuncia por secuestro y tortura. La víctima, un lobista que sabía demasiado. Presuntamente. No descarten que el bueno de Al Khelaïfi solo practicase. Está claro que sus jugadores necesitan algo más que millones para ganar la Champions.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión