Mujer adelantada a su tiempo

Ayer se celebró la onomástica de Edith Stein, que murió el 9 de agosto del 42. Fue la primera mujer que presentó una tesis doctoral en Filosofía en Alemania. Judía de origen, atea de creencias. Brillante en su profesión. Defendió el papel de la mujer en el ámbito profesional, diciendo que su participación en ese mundo se correspondía «con las demandas sociales que requieren la integración de las fuerzas femeninas en la vida del pueblo y del Estado». Ahí es nada.

Su amor a la filosofía y su carácter estudioso le llevaron a preguntarse por muchas cosas. A buscar la verdad. Una verdad que descubrió leyendo la vida de otra mujer. Otra mujer que fue también una 'adelantada' a su tiempo, en el siglo XVI: Teresa de Ávila.

Así, se convirtió. Y siguió defendiendo sus ideas. Dio clases y conferencias por muchos países. Pero los nazis le tenían medio manía. ¿Qué hacía una mujer hablando alto? ¿Y encima judía? Le prohibieron dar clase, le prohibieron enseñar. Le prohibieron vivir.

Edith Stein, entonces ya carmelita, fue detenida por la Gestapo y llevada a Auschwitz, donde murió muy pocos días después de llegar, gaseada. Yo he estado (en dos ocasiones) dentro de esas cámaras de gas, en Polonia. Solo recordar lo que allí sentí -sin gas, pero con mementos a personas como ella- me produce ganas de llorar.

Y hoy ese memento me lleva a esta mujer. Una mujer de armas tomar… a la que no pudieron tomar sino por las armas. Gracias por todo, señora.