Javier Domínguez recupera su trono en la Ehunmilak
El vitoriano obtiene su sexta victoria en Beasain y Elena Calvillo gana en categoría femenina, mientras Aritz Egea se impone en la G2H con nuevo récord
Si la Ehunmilak tuviese nombre propio este sería sin duda el de Javier Domínguez. El corremontes vitoriano recupera su trono en las 100 millas vascas y suma su sexta victoria tras un triunfo incontestable en esta undécima edición de la carrera. Su palmarés es simplemente asombroso en esta carrera. Seis victorias y dos segundos puestos en ocho participaciones, además de haber ganado la G2H en 2012.
Este año las incógnitas sobre su rendimiento, y en general de todo el pelotón ultrero, eran importantes tras dos años de parón y, en su caso, una paternidad que le ha quitado tiempo para los entrenamientos y la competición. Pero ha sido dar la salida en Beasain y disipar todas las dudas. Javi Domínguez es el de siempre. Un martillo pilón que paso a paso, golpe a golpe, va dejando atrás, cuando no eliminando directamente, a sus rivales.
Los números hablan por sí solos: ha sido el primero en pasar por los quince controles de la carrera, aumentado en cada uno de ellos su ventaja hasta cruzar la meta en 23 horas, 4 minutos y 6 segundos. Sin duda hubiese bajado de las simbólicas 23 horas (solo se ha logrado tres veces en toda la historia de la carrera) si no se hubiese entretenido en los metros finales saludando a amigos y recogiendo a sus hijos gemelos para cruzar la meta con ellos. Aún así, su diferencia con el segundo, Ander Erice (25h.36'03«), ha sido de algo más de dos horas y media, la máxima en la historia de la carrera.
En el primer tercio de carrera, Javi Domínguez se ha visto rodeado de aspirantes noveles que se han empeñado en seguir su ritmo. Craso error. Ha sido su sentencia de muerte. Del top ten de las primeras diez horas de carrera solo ha aguantado el navarro Ander Erice, perfecto conocedor de las trampas de la Ehunmilak (en 2019 fue quinto). Y mientras la ventaja de el corredor de Vibram aumentaba kilómetro a kilómetro, por detrás la pelea se dilucidaba por los otros dos puestos del podio.
Y ahí merece destacar al veterano corredor vitoriano Óscar Pérez de Nanclares. El alavés ha hecho una carrera muy inteligente, de menos a más, y tras pasar por los primeros controles más allá del puesto 40, hasta el paso por Amezketa (km. 96) no se ha dejado ver en el top ten. Eso sí, a partir de ese momento no ha hecho más que progresar hasta el tercer puesto final (25h.59'38«).
En categoría femenina, la Ehunmilak ha saldado la cuenta pendiente que tenía con Elena Calvillo, que sumaba cuatro segundos puestos en las última seis ediciones. Por fin, este ha sido el año en el que la beasaindarra ha podido subir a los más alto del podio ante sus paisanos.
Elena tenía claro el objetivo y ha dominado la carrera desde el principio, aunque marcada muy de cerca por la veterana vizcaína Oihane Pérez Reguera, una de las 'outsiders' de la prueba (2ª en la Hiru Haundiak del año pasado y 3ª en el Campeonato de Euskadi Ultra de este año) que se encaramó con descaro a la lucha por la victoria. De hecho, llegó a pasar primera por el control de Madarixa (km. 43), pero se retiró en la base de vida de Tolosa (km. 80).
Su abandono dejó mucho más líder a Calvillo que ahora tenía como perseguidora a Irene Guembe, dominadora del ultratrail navarro, pero a más de media hora. Mientras, por detrás, la otra gran favorita a la victoria, la vizcaína Leire Martínez, penaba un inicio demasiado conservador y se veía obligada a una remontada que iba a ser de puestos pero no de tiempo (llegó con hora y cuarto de retraso a Tolosa respeto a la cabeza de carrera) que le iba a condicionar hasta la meta.
Así que a partir de Tolosa estaba meridianamente claro las tres corredoras que iban a subir al podio de Beasain, salvo retirada de alguna de ellas. La duda quedaba en saber si las posiciones variarían. Y el desarrollo de la carrera evidenció que iba a ser poco probable. Calvillo no flaqueó en cabeza. Al contrario, se mostró como una líder muy sólida y amplió la ventaja sobre Guembe, que estuvo por encima de la hora en Oazurtza (km. 148), aunque al verse segura ganadora aflojó al final y llegó a meta, entrada ya la noche del sábado, con un tiempo de 28h.53'28«, tres cuartos de hora antes que la navarra.
Por detrás, la incertidumbre estaba en saber si Leire Martínez, en continua progresión, sería capaz de dar alcance la navarra. Y llegó a situarse a veinte minutos de ella en Oazurtza, pero Guembe supo dosificar, conservar la ventaja y llegar a meta con un tiempo de 29h.39'22«, frente a las 29h.57'16» de Leire Martínez.
Récord de Aritz Egea
Y si Javi Domínguez es el nombre propio de la Ehunmilak, Aritz Egea lo es de la G2H. El de Salomón se ha impuesto por la mañana con suficiencia en sus 88 kilómetros bajando además por primera vez de las diez horas (9h.51'45«), mejorando en justo diez minutos el récord que en 2019 logró Ion Azpiroz.
Lo de Aritz ha sido otra muestra absoluta de autoridad. En su caso, además, ante rivales que presagiaban una dura pelea por la victoria, como Tofol Castanyer y Ion Aizpuru. Pero el duelo solo ha durado hasta Aralar. En Lizarrusti ya les metía 10 y 5 minutos, respectivamente, y ante la manifiesta superioridad del de Urretxu, a partir de ahí el mallorquín y el beasaindarra han hecho causa común para limitar los desperfectos hasta entrar finalmente juntos en meta en un bonito gesto de Tofol, que ha esperado a Ion, en los puestos quinto y sexto con un tiempo de 10h.47'38«.
Los nuevos rivales de la carrera en su segunda mitad pasaron a ser Goar Lopetegi y Ioseba Eskudero, que mantuvieron a partir de Etxegarate un bonito duelo por el segundo puesto resuelto en el siempre decisivo tramo de Aizkorri en favor del Goar, que cruzaba la meta con un tiempo de 10h.09'24«. Siete minutos después lo hacía Ioseba (10h.16'28»).
En categoría femenina, María Richter dominó la prueba hasta su retirada en la base de vida de Etxegarate. A partir de ahí tomó la cabeza de carrera Gemma Barrabeig hasta cruzar la meta en primera posición con un tiempo de 14h.06'34«. Por detrás, Amaia Larreategi y Amaia Ochoa de Alda también se vieron beneficiadas por la retirada en Etxegarate de Carla Junquera, tercera hasta ese punto, y ocuparon los otros dos cajones del podio, con un tiempo de 14:33:15 y 15:06:03, respectivamente.
Y mientras sigue el goteo de participantes llegando a meta (el cierre de control de la Ehunmilak es el domingo a las 18:00), este domingo se disputa la Marimurumendi, prueba de 42 kilómetros por los montes del entorno de Beasain.
