El restaurante vizcaíno con más de 80 premios con los manjares más frescos del puerto

Los entraditos en años de Bermeo recuerdan al bar Artza como el 'top ten' de los garitos de los ochenta, pero su reconversión como restaurante, hace ya más de dos décadas, tampoco se ha quedado atrás en cuanto a categoría, «que es de diez», como aseguran sus habituales clientes.

Ubicado frente al puerto pesquero la entrada de los manjares más frescos de la mar están más que asegurados en la cocina de este céntrico establecimiento hostelero. Su propietario José Antonio Iglesias, reconoce bien la calidad de un pescado, entre otros motivos porque él trabajó a bordo de pesqueros como marinero.

«Desde chaval, primero como 'txo' y luego como cocinero, tanto en bajura como en atuneros», relata este bermeotarra que ha protagonizado conocidos programas de cocina de la televisión vasca. En el Artza no se sirven sofisticados platos, ni falta que hace. «Aquí llevamos los perolos directamente de la cocina a la mesa».

En las paredes del comedor que atiende también su mujer, Begoña Zuazua, lucen además txapelas y bastones, que revelan el éxito de sus cazuelas en los certámenes gastronómicos de medio Euskadi. A Iglesias y a su segundo de a bordo a los fuegos, Ibon Nisa, no se le resiste ningún plato, «desde paellas, marmitako, bacalao, guisado y chipirones...», enumera Iglesias. En total atesora: «más de ochenta premios», confirma.

En las mesas del Artza, no obstante, el marmitako es la estrella del menú. «Se sirve los 365 días del año». El bonito de la ensalada bermeana «está cocido en casa, a la manera que se hace en los barcos», y entre besugos, rodaballos, rapes y anchoas, el restaurante cuenta con otra estrella culinaria: la raya, poco habitual en los menús de otros locales, pero que en la villa marinera es «muy apreciada».

¿Algún vino para acompañar al menú? «El que quieras», dice, para dar cuenta de la variedad de etiquetas de su bodega.

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