Fiesta teutona en Pozas

La familia Thate, Enrique, Carmen y Alfred, es muy apreciada en Bilbao desde que en 1918 llegara a la villa el abuelo Hermann, quien supo ver que en Bilbao había una gran colonia alemana. Desde 1922 la familia regenta la charcutería La Moderna, actualmente ubicada en la calle Colón de Larreategui 25, donde los bilbaínos compran todo tipo de productos alemanes –salchichas, fiambres o embutidos– que fabrican en su propio obrador. En marzo de 1999 abrieron el restaurante Ein Prosit en la Plaza del Ensanche y desde el primer momento se convirtió en uno de los lugares de encuentro para los lugareños.

Los Thate inauguraron el pasado 6 de febrero el Bierstube by H. Thate –un homenaje al abuelo que se instaló en la villa a principios del siglo XX– que pretende ser más informal que el Prosit. Ubicado en Licenciado Poza 50, donde hasta hace unos meses se encontraba el Or-Konpom, cuenta con ocho mesas altas y tres bajas, con capacidad para 32 comensales, y tres mesas en la terraza. Al frente del negocio se encuentra Alfredo Thate, durante años responsable de la cocina del Prosit, que conoce todos los secretos de la gastronomía alemana, no en vano estuvo varios meses trabajando como cocinero en Siegen, localidad de la Selva Negra.

En el Bierstube se puede disfrutar de cualquiera de los pintxos que presentan en su barra, como croquetas variadas, tortillas, sándwich de jamón y queso, tostas de jamón o bocadillito de bonito con alegría, y de una selecta carta de picoteo. La fiesta gastronómica teutona comienza con unas ensaladillas alemanas, Fleichsalat o Kartoffelsalat (jamón molido, mortadela alemana, pepinillos alemanes y mahonesa), Kartoffein tres salsas, que no son sino patatas fritas muy crujientes –de hecho las fríen dos veces–, con salsa brava, mostaza y mahonesa. El pastel de carne, bautizado Fleischkäse, lleva queso havarti, cebolla pochada y patatas fritas.

También ofrecen maxmix Terramar, que lleva ventresca de bonito, anchoas y pimientos del piquilloy Räucherfischbrett o tabla de salmón y bonito ahumado de Keia. Para continuar disponen de un surtido Bremen, que incluye salchichas de su obrador, Brarwurst, Frankfurt y Alfred con chucrut y ensalada de patata, además de Schwinnehaxe, codillo asado de 650 gramos con chucrut y puré de patata.

Como novedad ofrecen bocata de codillo asado con mostaza dulce y cebolla pochada, ideal para llevar a San Mamés cuando juega el Athletic. Todo ello acompañado de cerveza; tienen varios cañeros HB Munich –tostada, rubia, rubia sin filtro y de trigo– y botellines de cerveza trapense y de Abadía belga. También, para quien desee comer con vino, tiene una pequeña carta, en la que incluyen un Riesling.

• Temas
• Restaurantes
• Bilbao