Netanyahu acepta negociar la tregua en Gaza en vísperas de su visita a Trump
Israel envía a Catar una delegación para iniciar «conversaciones estrechas» con la milicia, que plantea cambios a la propuesta inicial
Decenas de miles de israelíes se echaron este sábado a las calles de Tel Aviv y Jerusalén para pedir al Gobierno de Benjamín Netanyahu que ... acepte el alto el fuego en Gaza y los rehenes puedan volver a casa. Las protestas arrancaron al tiempo que el gabinete de seguridad se reunía para analizar la respuesta positiva de Hamás a la propuesta de tregua de sesenta días. Era un encuentro clave para establecer la estrategia hebrea antes del viaje del primer ministro a la Casa Blanca, previsto para mañana.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quiere un alto el fuego y, sobre todo, quiere ser la persona que dé la noticia al mundo. Antes habrá que resolver los cambios propuestos por Hamás al texto de la tregua referidos a la entrega de ayuda, la retirada de tropas israelíes de la Franja y las garantías para negociar el final de la guerra. Para ello, los medios israelíes aseguraron que Netanyahu ordenó el envío de una delegación a Catar con el fin de iniciar «conversaciones estrechas». El inquilino de la Casa Blanca vaticinó que el acuerdo estará cerrado la próxima semana.
Los islamistas respondieron de forma «positiva» a la propuesta de Trump a última hora del viernes e indicaron su disposición a retomar la negociación indirecta con el enemigo. Sin embargo, fuentes cercanas al proceso revelaron al diario 'The New York Times' que Hamás plantea tres cambios importantes. El primero afecta al reparto de ayuda durante la tregua ya que quiere que vuelva a manos de Naciones Unidas. El segundo tiene que ver con la delimitación de las líneas a las que se deben retirar las tropas israelíes, que en la actualidad ocupan el 75% de la Franja. Y el último se refiere a las garantías para que el cese temporal de hostilidades abra el camino hacia el fin de la guerra, un extremo al que se niega Tel Aviv porque exige, primero, la desaparición de la milicia, la entrega de las armas y el exilio de sus líderes.
Un alto funcionario del movimiento islamista, considerado terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, declaró al diario árabe 'Asharq al Awsat' que el alto el fuego podría comenzar la próxima semana. Esta fuente matizó que está pendiente de aclarar también cuántos prisioneros palestinos serán liberados a cambio de cada cautivo israelí. A diferencia de lo ocurrido durante la tregua de enero y febrero, esta vez Hamás no celebrará ceremonias en cada entrega de rehenes.
Entrega de rehenes
Israel cree que unos veinte rehenes siguen vivos y que los cuerpos de otros treinta están retenidos en Gaza. La propuesta de Trump contempla liberar a diez con vida y entregar dieciocho cadáveres a lo largo de los sesenta días de tregua. Einav Zangauker, cuyo hijo Matan permanece secuestrado, exigió al primer ministro hebreo cumplir la promesa que le hizo esta semana y acepte un pacto que permita la salida segura de los cautivos en intercambios. «Si Netanyahu no hubiera frustrado el acuerdo anterior, ya estarían en casa. En este momento, cuando se teme gravemente por su vida debido a la presión militar, cuando nuestros heroicos soldados caen en una guerra que ya ha alcanzado sus objetivos, un alto el fuego es necesario».
El inquilino de la Casa Blanca vaticinó que el acuerdo estará cerrado la próxima semana
Por primera vez desde el atentado de Hamás del 7 de octubre de 2023, el primer ministro israelí visitó el kibutz de Nir Oz, uno de los puntos atacados, y por primera vez desde entonces parece cercano a aceptar una tregua que acerque el final de la guerra. Este cambio de estrategia en Gaza se debe a la presión de un Trump que hace dos semanas acudió a apoyarle a contra Irán y bombardeó las instalaciones atómicas de la república islámica.
La Franja se desangra bajo los ataques diarios y los disparos contra la multitud hambrienta en los puntos de reparto de ayuda de la Gaza Humanitarian Foundation (GHF), impulsada por Israel y EE UU. La ONU afirmó haber registrado la muerte de 613 palestinos en un mes en los alrededores de estos centros. «La situación es la peor que he visto. Es difícil encontrar palabras para describir el nivel de desesperación que he presenciado. La gente muere solo por conseguir comida», denunció Carl Skau, subdirector del Programa Mundial de Alimentos, quien visitó recientemente Ciudad de Gaza.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.