El presidente de Ecuador plantea recortar a la mitad su salario y el de altos cargos del Gobierno

La profunda crisis del coronavirus y la caída del precio del petróleo, su principal producto de exportación y del que depende la economía del país, han llevado al presidente de Ecuador, Lenín Moreno, a plantearse a reducir a la mitad tanto su salario como el del vicepresidente y ministros. El recorte, según ha concretado a través de Twitter, afectará «a todas las funciones del Estado», desde el Gobierno a la Asamblea Nacional. Con esta medida, en la que no se detalla el tiempo que estará en vigor, se pretende «sumar recursos par mitigar el impacto económico» que está causando la epidemia.

El secretario general de Gabinete, Juan Sebastián Roldán, ha señalado que este recorte y la aportación de los funcionarios, a quienes en marzo se les redujo un 8% sus honorarios, permitirá un ahorro anual de 300 millones de dolares al año. El sueldo del máximo mandatario del país ronda los 5.072 dólares (unos 4.600 euros), 4.869 el del vicepresidente y 4.463 el de los ministros. El mínimo salario básico que percibe la clase trabajadora ronda, por contra, los 400 dólares.

El constitucionalista César Raza hace hicapié en que el presidente tan solo puede reducir su remuneración y el de su equipo de Gobierno. Los de los funcionarios deben someterse a reformas legales, ya que «existe una disposición que impidea ganar más que el presidente, lo cual requeriría de una enmienda aprobada por la Asamblea legislativa», ha precisado.

El presidente ecuatoriano ha dado a conocer también la creación de un fondo de 1.300 millones de dólares para el sistema sanitario y la provisión de víveres para hacer frente a la emergencia actual. El número de muertos se eleva a 333, mientras que el de infectados por el Covid-19 asciende a 7.500 desde el pasado 29 de febrero.

Fuentes del Gobierno también han dado a conocer que a lo largo de las últimas tres semanas han retirado alrededor de 700 cadáveres que habían encontrado la muerte en sus propios domicilios de Guayaquil. Un equipo de policías y militares se han encargado de desarrollar estas labores debido que tanto el sistema sanitario como las funerarias se encontraban desbordadas, tal y como ha admitido Jorge Wated al frente de esta misión. No han concretado, sin embargo, la causa de estas muertes.

En un país, donde el toque de queda se prolonga durante quince horas, el mayor número de personas contagiadas se concentra en la provincia costera de Guayas concentra un 72% de los infectados. Sólo en su capital, Guayaquil, se contabilizan alrededor de 4.000 enfermos, de acuerdo con el gobierno nacional.