La oficina local de Cruz Roja Eibar-Ermua ofreció 8.128 respuestas el año pasado

La Cruz Roja Eibar-Ermua realizó el año pasado 8.128 respuestas, es decir, atendieron en más de 22 ocasiones diarias a las personas de los dos citados municipios. En concreto, la oficina local trabajó con 2.022 personas, una media de más de 5 personas diferentes al día. Sin duda, esta ONG local, que en la actualidad cuenta con alrededor de un centenar de voluntarias y de 25 a 30 permanentes para atender a Ermua, Eibar y alrededores, ha ido afianzándose con los años, desde que comenzara su actividad en el local de Erdikokale de la villa, (antigua tienda de telas), en la década de los 80.

Hace ya 40 años que su actividad central se instaló en el peaje de la autopista A-8, en su salida de Ermua, y en la actualidad se han trasladado a los locales de Torrekua (antiguo ambulatorio de Amaña), debido a que la Diputación de Bizkaia, propietaria del terreno donde se ubicaba su sede, ha solicitado su traslado. Durante este tiempo también han variado sus actuaciones y han ido ampliando su campo de acción, con multitud de materias en las que intervienen, principalmente para ayudar a las familias y personas más vulnerables de ambos municipios.

Entre sus programas se encuentra, por ejemplo, el de intervención social y juventud. En él se incluye el plan de empleo, que acerca a personas desempleadas al mercado de trabajo. El año pasado consiguieron que más de 80 personas que recibían alguna ayuda social encontraran un empleo. Al mismo tiempo se aplica la actividad de primera acogida, donde un grupo formado por técnicos y voluntarios dan información, orientación y apoyo individualizado a personas en situación de exclusión social, complementando con clases de castellano, talleres y salidas lúdico-pedagógicas. También se ocupan de los trabajos de servicio a la comunidad, alternativas al ingreso en prisión. Al cabo del año atienden alrededor de 10 personas.

Su programa de asesoría jurídica atiende a personas migrantes, facilitando ayuda para el proceso administrativo y la fase judicial con la misión de obtener el derecho a justicia gratuita.

Por otra parte, la entrega de lotes de alimentos mensuales también es una de sus tareas. El año pasado atendieron en Ermua a 65 familias y además, se entregaron lotes infantiles (pañales, papillas, leche en polvo y productos de higiene) a una media de 50 unidades familiares. En la localidad armera, donde se trabaja a través de tarjetas económicas de recarga (alimentación básica), también en relación con el ayuntamiento, se entregaron lotes infantiles a 35 familias.

Otro de los puntos de acción es la campaña de juguetes (no sexistas y no bélicos). El año pasado se repartieron entre 180 niños y niñas. También se ocupan de la entrega de material escolar básico al comienzo de cada curso.

Atienden, asimismo, un programa de pobreza energética en hogares de extrema vulnerabilidad. Se asesora en el consumo y en colaboración con los ayuntamientos se ayuda a las familias. Son en torno a las 150 familias entre Eibar y Ermua.

Cruz Roja interviene también, en el préstamo a ayudas técnicas (silla de ruedas o una grúa). El año pasado se entregaron medio centenar de estos aparatos. También realizaron tareas de formación a sus propias personas voluntarias y a empresas. El servicio de transporte realiza diariamente 500 kilómetros para llevar a personas en sus 4 vehículos adaptados a centros de Eibar, Markina, Mondragón...

En el programa de apoyo escolar cuentan en la actualidad con 10 niños a los que ofrecen ayuda dos días a la semana, con meriendas y visitas culturales. También ofrecen programas medioambientales a través del programa Hitzartuz, en colaboración con el Gobierno vasco, con alrededor de 300 familias atendidas entre Ermua y Eibar.

Apoyan en sus excursiones a residencias de la tercera edad y se encargan del asilo a personas refugiadas. En la actualidad, Ermua no cuenta con piso para estos casos, no así Eibar, que cuenta con 2 viviendas. En la localidad vecina contribuyen, además, con la tómbola solidaria local con la mtea de conseguir financiación para su área de Juventud.

Por último, trabajan en la cooperación internacional con proyectos para los que los ayuntamientos aportan financiación puntual (Ucrania o Turquía). Además, los eibarreses ampliaron estas ayudas, en 2022, a un proyecto de Cruz Roja en Filipinas.

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