Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
La Mala Rodríguez ha cumplido 25 años sobre los escenarios. La rapera jerezana, una de las pioneras de la música urbana en España, alcanzó la fama muy joven, con apenas 20 años, convirtiéndose en la primera mujer en ganar un Grammy Latino en esta categoría. En este tiempo, sin embargo, no ha sido todo de color de rosa. La cantante y compositora andaluza se ha sincerado con Jordi Évole sobre los peores episodios de su vida, entre ellos, los abusos que sufrió, sus trastornos alimenticios, sus pensamientos suicidas y su pasado en Onlyfans.
Sobre esta plataforma de suscripción, que durante la pandemia se hizo muy popular y que ofrece contenido erótico para adultos, La Mala aseguró en 'Lo de Évole' que creó su cuenta sin saber de que se trataba. «El mismo día me hice perfil de LinkedIn y de Onlyfans. No tenía ni puta idea de lo que era», comenzó diciendo. Reconoce que se gana «una locura» de dinero, pero reniega de su pasado en ella, ya que es «una forma de prostitución». «Las personas valen más que una mierda de suscripción. Yo no soy prostituta, y eso es prostitución. Es lo que las chicas no entienden, lo que no se está entendiendo... pero sí, es prostitución», señala.
La artista tampoco quiso ofrecer demasiados detalles sobre su actividad en esta plataforma: «He tenido conversaciones que me hacen decir... 'la gente está muy mal'. No te voy a poner un ejemplo. No quiero contar nada porque vas a vomitar. Yo vomitaría», se limitó a decir.
Este corte habla de bulimia y Onlyfans. Pero en realidad va de dominación masculina #LoDeLaMala pic.twitter.com/QMc9DIYLOW
— Lo de Évole (@LoDeEvole) March 9, 2025
Con su disco 'Lujo Ibérico' irrumpió en la escena musical rompiendo barreras en un negocio y un género dominado por hombres. En el ámbito personal, la andaluza ha vivido algunas relaciones tóxicas: «He tenido una relación completamente abusiva. Era una persona muy celosa, hasta el punto de no dejarme salir de casa. De enfadarse, de peleas... Toda esa movida. Violencia física, violencia de todo tipo». Sin embargo, se niega a «ir de víctima». «Me define el cómo he salido adelante, no lo que me haya pasado», asegura.
Sin embargo, «en algunos momentos» ha tenido tendencias o comportamientos suicidas. «En algunos momentos he pensado que no debería estar aquí, que no me gusta esta vida. No sé por qué. Supongo que es porque paso mucho tiempo sola, o porque ya viene ese chip dentro de mí», relató la artista al periodista catalán. Asimismo, confesó los trastornos alimenticios que ha sufrido. «He tenido comportamientos que han tenido que ver con la anorexia o la bulimia. Yo no sé quién no lo ha tenido. El otro día en una mesa con un montón de artistas, creo que todas».
Évole también quiso ahondar en su infancia y adolescencia. La cantante no pudo evitar romperse al hablar de su madre. Una mujer que, a los 17 años, se queda embarazada de un hombre, de su padre, a quien La Mala no conoce. Para ella su progenitora es un ejemplo de superación: «Eso es lo que me da más... lo que me da como más rabia. Por ella. Porque nadie merece que te aparten, que te hagan sentir que te tienes que quitar de en medio. No tienes culpa de nada. Ella ha hecho lo que ha podido, y yo también».
Todo sobre su madre. ¿O sobre ella? #LoDeLaMala pic.twitter.com/fuDwAXrtbQ
— Lo de Évole (@LoDeEvole) March 9, 2025
«Y sobre tu padre, ¿nunca has tenido curiosidad por saber quién era?», se interesaba Évole. «No, pero por odio, por rabia. Él dejó a mi madre embarazada y se largó de casa, ella era menor. Entonces, un poco de coraje sí que le tengo, no me junto», contesta tajante la jerezana.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Tres días de desfiles de Moda Norte en Santander
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
La agresión a un menor del Iurretako en Salou enfrenta a padres, directiva y partidos
Javier García Legorburu
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.