El batería más joven del mundo y otros récords infantiles

El Guinness de los récords, ese libro cervecero creado en los años 50 para zanjar discusiones de pub, es un compendio de lo más meritorio y lo más absurdo del ser humano. Los caminos que llevan a sus páginas no pueden resultar más diversos: desde ser el pionero en explorar un territorio desconocido hasta engullir un montón de perritos calientes en tres minutos (la marca actual está en nueve y la ostenta un español, Josué Montero). Esa condición de batiburrillo entretenido y desconcertante se acentúa cuando nos sumergimos en la categoría 'youngest', la que reconoce a los más jóvenes en conseguir determinados logros. Ahí se mezclan conductas admirables y majaderías, niños talentosos y padres que mangonean, tesón y pura casualidad. Y aquí, en este repaso a doce epígrafes protagonizados por críos, va a ocurrir exactamente lo mismo.

Empezamos con un récord de larguísimo recorrido. La estadounidense Marjorie Gestring aparece en el Guinness como la deportista más joven que ha logrado una medalla de oro olímpica en una disciplina individual. Ocurrió en 1936, en los Juegos de Berlín, cuando Marjorie tenía 13 años y 268 días y se llevó el oro en salto desde el trampolín de tres metros, en un apretado duelo con una compatriota. Marjorie falleció en 1992, con 69 años. Como parte de un equipo, se impone en esta categoría la patinadora Kim Yun-mi, gracias a la victoria surcoreana en los relevos femeninos de 3.000 metros en las Olimpiadas de 1996. Ella tenía en aquel momento 13 años y 85 días.

Partimos del hecho de que cualquier bebé de meses puede aporrear un tambor de manera más o menos rítmica, pero Guinness reconoce como «batería profesional más joven» al estadounidense Julian Pavone, que alcanzó la cifra exigible de veinte conciertos cuando tenía 4 años y 319 días. Julian, que actualmente tiene 15 años, ya era para entonces un veterano que había grabado un disco antes de cumplir los 2. A nadie le sorprenderá saber que su padre, Bernardino Pavone, toca la batería.

Aquí, Guinness solo contempla a presentadores que conduzcan en solitario su propio programa. El récord lo ostenta desde 2004 el australiano Luis Tanner, que tenía 6 años y 168 días cuando se estrenó su espacio semanal 'Cooking For Kids With Luis' (es decir, cocinando para niños con Luis). Se emitieron veinte episodios, en los que el apañado Luis preparaba recetas como kebab de fruta, tarta guatemalteca, yum cha o espaguetis a la boloñesa.

¿A que no adivinan a qué se dedica el padre del DJ más joven? Efectivamente, el pequeño Archie Norbury (nacido en Dubái, hijo de británicos y afincado con su familia en Hong Kong) era casi un bebé cuando empezó a jugar con los 'decks' de su padre, y este asegura que pronto se dio cuenta de que el pequeño tenía madera. Archie ha entrado en el Guinness gracias a su sesión de marzo del año pasado en el club Bungalow, de Hong Kong: entonces tenía 4 años y 130 días y pinchó durante una hora, sin ayuda, algunos de sus temas favoritos de house. Archie sigue en ello y ya ha pasado por festivales como el Raver Tots británico, con 7.000 asistentes.

En la categoría masculina, el récord está en manos del ruso Sergéi Karjakin, nacido en 1990 en Ucrania, cuando todavía formaba parte de la Unión Soviética. Sergéi, una de las estrellas mundiales del ajedrez, aprendió a jugar con 5 años y se convirtió en gran maestro internacional con 12 años y siete meses. Ocupa el puesto número 17 en el ránking mundial, pero llegó a estar el cuarto. En la categoría femenina, la más joven en alcanzar el nivel de gran maestra fue la china Hou Yifan, con 14 años y 184 días. También es la competidora más joven que ha ganado el mundial femenino y encabeza actualmente la clasificación de la Federación Internacional de Ajedrez.

Seguro que en muchas casas hay candidatos más que dispuestos a batir este récord, pero de momento sigue correspondiendo al estadounidense Víctor de León III, más conocido como 'Lil Poison', que empezó a jugar al 'NBA 2K' cuando tenía 2 años, participó en su primera competición de 'Halo' con 4 y debutó en la competición profesional a los 6. Como en este mundo las cosas se mueven muy rápido, en la actualidad, con 21 años, es ya exprofesional.

Sí, sí, esa categoría existe, por demencial que pueda parecer. El dudoso mérito corresponde a Luther y Johnny Htoo, dos gemelos de etnia karen de Birmania que, con 12 años, encabezaban un grupo armado conocido como 'El Ejército de Dios'. Según sus seguidores, los hermanos poseían «poderes místicos» como la invulnerabilidad a las balas o la capacidad de matar con solo concentrarse. A comienzos del año 2000, los guerrilleros tomaron setecientos rehenes durante veinticuatro horas en un hospital tailandés, para exigir que los médicos se trasladasen a su base de las montañas y atendiesen a los compañeros heridos. Las noticias más recientes sobre ellos situaban a Luther en Suecia y a Johnny en un campo de refugiados de Tailandia.

También en este epígrafe los responsables de Guinness emplean la palabra mágica, 'profesional', sobre todo ahora que cualquiera puede rodar un cortometraje bastante aparente con su móvil. Ellos reconocen como director más joven al nepalí Saugat Bista, que tenía 7 años y 340 días cuando se estrenó en los cines su debut cinematográfico, 'Love You Baba', sobre una niña que ha perdido a su madre en el parto. De eso han pasado seis años y Saugat ya cuenta con otra referencia en su filmografía, titulada 'Hairaan'. De nuevo, la familia constituye una evidente ventaja como plataforma de lanzamiento, ya que Saugat es hijo de Gajit Bista, un conocido actor nepalí que, de hecho, protagonizó 'Love You Baba' en el papel de padre viudo.

Jonathan Silverman, de Estados Unidos, visitó el polo norte en 1999, cuando tenía 9 años, y alcanzó el extremo opuesto de la Tierra en 2002, con 11 años y 211 días. ¿Hablamos de un explorador precoz, con dotes asombrosas de supervivencia? A juzgar por los detalles que aporta el Guinness, esos rasgos heroicos parecen discutibles: el primer viaje lo hizo en una expedición turística del rompehielos ruso 'Yamal', mientras que el segundo, también parte de un paquete turístico, consistió en un viaje aéreo desde Chile.

¿Estaban esperando una buena dosis de absurdo? Pues aquí la tienen. Al estadounidense Matthew Adams le extrajeron las dos muelas del juicio inferiores en una clínica de Michigan cuando tenía 9 años y 339 días, para solucionar un problema de falta de espacio para la dentadura. Seguro que no fue un buen trago, pero al menos le ha servido para llevar ya dieciséis años en el Guinness. Los aficionados a la 'trivia' odontológica también deben reparar en el récord involuntario del británico Daniel Sánchez-Ruiz, la persona más joven con una dentadura postiza completa: tenía 3 años y 301 días y padecía una enfermedad genética llamada displasia ectodérmica hipohidrótica.

Este récord se ha convertido en perpetuo, porque actualmente existe un límite mínimo de edad (16 años) para acometer el reto de cruzar a nado el Canal de la Mancha. En 1988 había menos remilgos y el británico Tom Gregory consiguió atravesarlo en once horas y cincuenta y cuatro minutos, cuando tenía 11 años y 336 días. Años más tarde, relataría su experiencia en el libro 'A Boy in the Water'. Ah, a Tom no le hace ninguna gracia el veto a los menores de 16, por mucho que le garantice su hueco en el Guinness: «Es una pena que la protección se cruce en el camino del esfuerzo», afirma.

Esta entrada ya no pertenece a la categoría de 'youngest', pero también encaja en este mosaico de niños peculiares. Según un estudio del 'New York Post' al que el Guinness da validez, la actriz infantil mejor pagada fue Miranda Cosgrove, la estrella de la serie 'iCarly', que a los 16 años cobraba 180.000 dólares por episodio. Todavía se embolsaba más dinero su homólogo masculino, Angus T. Jones, el niño de 'Dos hombres y medio', al que llegaron a pagar 250.000 dólares por capítulo. «No podía conducir, pero sí comprarse un Porsche nuevo cada semana», puntualizó el periódico.