Batalla campal y un detenido tras el mitin de Vox en San Francisco

El acto estaba calificado de «muy alto riesgo» y a la hora de la verdad se vio por qué. El mitin que celebró ayer Vox en el barrio bilbaíno de San Francisco acabó en una batalla campal y en enfrentamientos de radicales convocados por grupos antifascistas con la Ertzaintza. La tensión fue 'in crescendo' hasta que los miembros de la formación de extrema derecha abandonaron el lugar. En ese momento la situación se descontroló entre cargas policiales y lanzamientos de objetos por parte de los manifestantes. Un joven de 22 años acabó detenido por atentado contra la autoridad, según confirmaron fuentes de la Policía vasca. Varios agentes fueron atendidos de heridas leves.

Vox celebraba su primer acto de precampaña electoral en Bilbao en un foco especialmente caliente. El secretario general del partido, Javier Ortega Smith, y miembros de la candidatura para el 12-J se plantaron en el barrio con mayor población extranjera de la ciudad para denunciar un «gueto de narcotráfico, okupas y robos». La convocatoria fue tachada de «provocación» por Sare Antifaxista, que además recordaba que ayer se cumplían 83 años de la entrada de las tropas franquistas en la villa. Los llamamientos para manifestarse en contra corrieron como la pólvora por las redes sociales.

La Ertzaintza, con refuerzos de la Policía Municipal, desplegó un amplio dispositivo en la zona desde horas antes. Los participantes en el mitin, celebrado en la plaza Corazón de María, fueron recibidos entre gritos de «fuera fascistas de nuestros barrios». El acto en sí se desarrolló sin incidentes mientras vecinos asomados a los balcones protagonizaban una sonora cacerolada. Sin embargo, los potentes altavoces instalados por la organización y el tono de los intervinientes contribuyeron a que la escasa veintena de asistentes escuchara los discursos sin mayor problema. Ortega Smith incluso llegó a jalear a los residentes para que hicieran aún más ruido.

La tensión se desbordó al término del mitin, cuando los participantes emprendieron su marcha entre fuertes medidas de seguridad. Fue entonces cuando agentes de la Ertzaintza cargaron contra algunos manifestantes para disolver la concentración. Varios radicales respondieron lanzando todos los objetos que encontraron a su paso, como botellas de cristal y mobiliario de una terraza de la calle San Francisco. El enfrentamiento se mantuvo incluso una vez que los miembros de Vox habían abandonado la zona. Tras varios intentos, las furgonetas de la Policía vasca abandonaron el lugar hacia las 21.30, hora y media después del inicio del acto.