«Me dicen señor senador, pero sigo siendo Joaquín»

Ellos tres van a llevar a Madrid la voz de la España vaciada. Por Teruel y «por todos los 'Terueles' que hay: Cuenca, Guadalajara, Jaén...», enumera Egea, «el señor senador», que le dicen de broma, aunque él es «solo Joaquín». «Con el 57% escrutado entré ya como senador y con el 87% me llamó mi primo para confirmármelo. Mi madre había hecho una merienda con los amigos». Joaquín siguió el recuento «encerrado» en su casa de Alcañiz con su mujer y sus dos hijas. «La mayor tiene 9 años y esta mañana me ha dicho: 'Papá, ahora a Madrid'».

Pero Tomás Guitarte, al que los sondeos a pie de urna ya le daban el escaño, celebró el «histórico» triunfo en el bar Tapas y Copas de Calamocha. «Venimos siempre a almorzar y el domingo nos dieron las tres de la mañana. Pero fueron unas celebraciones de andar por casa». Como la campaña. «Hemos gastado solo 14.000 euros, en cartelería, papeletas... Ha sido una lucha de David contra Goliat». Y han salido victoriosos porque su escaño es más que eso. En la complicada ecuación que han dejado los comicios, su voto, como el de los regionalistas cántabros, el de los gallegos y los dos logrados por los canarios, puede resultar clave. «No venimos a crear conflicto. Vamos a facilitar la gobernabilidad», anuncia Guitarte.

- ¿Qué sintonía tienen con Pedro Sánchez?

- Le conocemos porque hemos hablado con todos los presidentes. Nos dio buena sensación, se mostró receptivo.

- ¿Qué es lo primero que van a pedir?

- Urge arreglar el tramo de ferrocarril Zaragoza-Teruel-Sagunto porque tiene unas pendientes y unas curvas... Es el tramo con la velocidad comercial más baja de España, no llega a los 70 kilómetros por hora.

Además de un servicio de doble vía allí, Teruel Existe reivindica mejores carreteras, que internet llegue a la mitad del territorio donde no llega... «No es la carta de los Reyes Magos, son promesas incumplidas. Así que iremos y preguntaremos: 'Oiga, esto que caducó, ¿por qué caducó? El Estado ha dado la espalda a la España vaciada, pese a que les damos cien escaños. Pero hemos levantado la voz y hemos dicho: 'Ya está bien'».

Por todos esos pueblos olvidados como Bueña, de donde es Beatriz la senadora, y donde durante 17 años no nació un solo niño. «Abres un negocio y te echa para atrás porque quedamos cuatro. Eso sí, pagar pagamos como los demás», se duele Francisco, que tiene un restaurante en Calamocha. Los parroquianos, dice, no hablan de otra cosa.

Y es verdad. «Mi mujer me decía: '¿Cómo votas a Teruel Existe si no vas nunca a Teruel'? Pero me identifico con ellos, es una plataforma donde convergen ideologías diferentes», explica Ramón Mur, periodista jubilado y vecino de Alcañiz. Cree que el triunfo de Teruel Existe «va a arrastrar a otras provincias a hacer lo mismo». Que falta hace. «También hay Francia vaciada pero viajas por allí y en los caseríos ves ropa tendida. Aquí no».