Diario de la campaña europea en Euskadi

Los jeltzales llevaron su acto central del día a Santurtzi, localidad natal del futuro lehendakari, y que la cabeza de lista para el 9-J situó, junto al resto de la Margen Izquierda vizcaína, como ejemplo de una «espectacular transformación» que contrapuso con el despliegue de los fondos europeos de recuperación. «No están llegando al tejido productivo y no están sirviendo para transformar», lamentó Agirregoitia, que se comprometió, por ejemplo, a simplificar la burocracia de los programas de pesca.

La candidata a eurodiputada jeltzale se alineó con Sandro Gozi, el aspirante de Renew Europe -la familia liberal en la que se integra el PNV en Bruselas-, al cerrar la puerta a cualquier clase de entendimiento con la extrema derecha. «Siempre diremos que no. No hay niveles ni jerarquías cuando hablamos de extrema derecha. En Euskadi, en Madrid y en Bruselas nos tendrán enfrente», planteó la aspirante frente a la postura adoptada por Ursula von der Leyen, proclive a acuerdos con ECR, uno de los dos grupos ultras que tienen representación en la Eurocámara.

En el acto también intervino Andoni Ortuzar, centrado en promover la participación de cara a unos comicios en los que los sondeos estiman un alto índice de abstención. El presidente del Euzkadi buru batzar afirmó que las europeas «son unas elecciones tan vascas y tan nuestras como las del 21 de abril (las autonómicas) y tenemos que ir a votar como fuimos entonces». El líder nacionalista dijo que a Euskadi «no le da igual quién le represente» y acusó de forma velada a EH Bildu de «no atreverse a decir que hasta ayer era antieuropeo y que le gustaba más la Unión Soviética que la Unión Europea».

Pernando Barrena aseguró ayer que «EH Bildu trabajará para que Euskal Herria esté representada en los ámbitos de decisión europeos». El cabeza de lista de la coalición en las elecciones del 9 de marzo compareció frente al monumento de los Fueros de Pamplona, un guiño simbólico para algo que «hemos defendido durante los últimos años en el Parlamento Europeo y es fundamental: Euskal Herria es una nación compuesta por siete territorios y tiene derecho a decidir».

Barrena vaticinó que, dentro de dos semanas, «Euskal Herria votará diferente que los Estados español y francés». Lo declaró pocos días después de que Arnaldo Otegi advirtiera que llega «el Parlamento Europeo más reaccionario de la historia».

Para Bildu, «estamos ante un contexto europeo en el que los derechos fundamentales de la ciudadanía están en peligro por el auge de la ultraderecha y sus discursos excluyentes y condicionado por el clima belicista». Por eso, Barrena y los suyos abogan por «retomar la idea de los principales valores europeos, que no son otros que la democracia y la paz».

El cabeza de lista, un histórico de la izquierda abertzale, ahondó en esa idea de «profundizar en los valores democráticos porque la ampliación de derechos es la mejor garantía para frenar a la ultraderecha». También pidió «respetar los derechos de las naciones europeas, como la vasca».

«Son cada vez más las decisiones que se toman en Europa que afectan a la ciudadanía vasca. Las instituciones y la ciudadanía de este país tienen que estar en esos ámbitos de decisión», recalcó, arropado por otros líderes de Bildu. Según destacó, esa presencia europea es la mejor garantía «para salvaguardar los derechos y los intereses de las gentes de este país y para que nadie tome en nuestro nombre decisiones que nos afectan».

Su análisis de la situación general, en pleno «auge belicista», no es optimista. «Nos encontramos en un momento en el que están en riesgo los originarios valores europeos de la paz y de la democracia. Es necesario profundizar en la democracia, en las ideas pacifistas», reclamó.

Los socialistas se encargan de recordar día tras día que su mensaje central para esta campaña es el del miedo al auge de la extrema derecha en Europa. Insistió ayer Idoia Mendia, quien advirtió de que «no hay una ultraderecha buena y otra mala» porque ambas comparten un único proyecto consistente en «acabar con la justicia social, con las libertades de las mujeres, contra el colectivo LGTBI, contra los inmigrantes y contra los medios de comunicación».

El aviso sobre un eventual crecimiento de fuerzas como Vox volvió a monopolizar el discurso de la candidata a eurodiputada, quien censuraba que el PP haya «confirmado» que sus alianzas con el partido de Santiago Abascal «no eran coyunturales, sino una estrategia de fondo». «Han elegido ultraderecha y menos Europa. Los socialistas siempre vamos a estar con la democracia y con más Europa», contrapuso, en referencia expresa al lema que el PSOE está utilizando en la carrera hacia el 9-J.

En un acto celebrado en Lasarte-Oria, la exvicelehendakari alertó de que la «alianza ultra» podría poner en riesgo al sector primario, incluidos los baserritarras y arrantzales vascos, porque «Le Pen ya ha dicho que si es presidenta prohibirá el tomate español y Milei quiere impedir que nuestros pesqueros faenen en sus aguas territoriales». También considera que peligraría la calidad de los empleos porque «los ultras desprecian a los sindicatos de clase y su capacidad para mejorar las condiciones laborales», y la viabilidad de las empresas porque «tienen políticas económicas nacionalistas».

Frente a este «riesgo de involución que busca acabar con todo lo que hemos ido levantando todos estos años», Eneko Andueza reivindicó una apuesta por la UE «porque es el único camino real y efectivo que tenemos, es la senda a seguir para desarrollar una auténtica agenda verde antes de que sea demasiado tarde».

En el capítulo de propuestas, el secretario general del PSE-EE planteó poner en marcha una ley de adaptación al cambio climático, promover un transporte público más asequible y sostenible, y crear una estrategia de acceso a la vivienda.

La política migratoria es uno de los asuntos que habitualmente marcan la agenda europea y el PP quiere que su mensaje al respecto quede claro. «Los que deciden quién entra por las fronteras deben ser los estados, no las mafias», señaló ayer Carlos Iturgaiz, candidato a eurodiputado y expresidente de los populares vascos, quien situó como reto para los próximos cinco años en Bruselas y Estrasburgo el «freno a la entrada irregular de personas» en la Unión Europea.

Iturgaiz, que figura en el puesto 24 de las listas al Parlamento Europeo, señaló que la llegada de inmigración de forma irregular ha ascendido «un 190%» en España en un año. Esas personas, bajo su punto de vista, deberían ser «expulsadas» a través de procedimientos que «cumplan con los derechos fundamentales». También abogó por impulsar nuevos mecanismos para «perseguir a las mafias» dedicadas al tráfico de personas y añadió que las fronteras «no pueden ser permeables».

El aspirante popular hizo estas declaraciones en un acto celebrado en Vitoria en el que, como en el arranque de campaña que tuvo lugar la víspera, estuvo arropado por Javier de Andrés. El actual presidente del PP vasco centró su intervención en denunciar que en Euskadi hay partidos que concurren a estos comicios como «adalides» de la UE, pero al mismo tiempo se caracterizan por fomentar «la ruptura y la separación». Una clara referencia a PNV y EH Bildu, que reivindican el derecho a la autodeterminación en sus respectivas campañas para el 9-J.

De Andrés afirmó que la «unión» es un valor fundamental para Europa y lamentó que las formaciones nacionalistas vascas vayan «en sentido contrario» al valorar «la desunión, la disgregación y la separación». Censuró que las siglas abertzales vean «virtudes» en la «fractura» y advirtió de que Euskadi «no se puede descolgar de la dirección en la que van los tiempos», en los que «la unión gana importancia y peso».

Por su parte, el líder del PP en Álava, Iñaki Oyarzabal, criticó que el resto de partidos miren «hacia otro lado mientras los delincuentes campan a sus anchas».