La transformación del negocio de Dominion reduce un 30% su beneficio

La cotizada vasca presidida por Mikel Barandiaran culminará este año las tareas para centrar su actividad en dos áreas: servicios a la industria en cuestiones de sostenibilidad y en lo que llama proyectos 360. Una línea que contempla el diseño, construcción y posterior mantenimiento de infraestructuras, bien de energía, como sanitarias, tecnológicas o de otro tipo.

La facturación ascendió a 1.153 millones, un 4% menos, que evidencia la caída del 12% en el negocio de los proyectos 360 por la ralentización de la construcción de plantas renovables en Latinoamérica y África. Por su parte, los servicios a la industria, crecieron ligeramente: un 1% con 831 millones. Se consolidan así como la parte principal de la cartera de negocio, algo estratégico para la empresa dado que es la actividad con mayor margen de rentabilidad.

La deuda neta de Dominion pasó de 75 millones a 183 disparando los gastos financieros que lastran el beneficio. El grueso de esta situación viene del retraso en la venta de 4 parques de 240 MW en República Dominicana. La operación, dilatada por la celebración de elecciones, se cerrará en el primer semestre de este año, liberando del balance también la deuda asociada a esas infraestructuras y, por lo tanto su coste financiero.

Otra parte importante de la carga de préstamos -76,9 millones- era el final del pago de la operación Incus. En 2021 Dominion intentó convertirse en productor de energía renovable haciendo socio a ese fondo de inversión, que aportó 50 millones. El cambio de estrategia supuso la recompra a Incus de sus acciones. Aun así, la deuda se mantiene en niveles tolerables ya que representa 1,2 veces el beneficio antes de impuestos y compromisos financieros.

Resueltos estos flecos, Dominion seguirá avanzando en consolidar su modelo de negocio cenrtado en la prestación de servicios a la industria. En 2025, la compañía confía en dar un importante salto en el área de sostenibilidad y economía circular. El objetivo es lograr unas ventas en este campo de 500 millones, con una aportación al ebitda de otros 50.

Para ello la compañía trabaja en comprar pequeñas empresas con las que crecer sumando negocio en Europa y Oriente Medio. Esta facturación es una de las claves en la apuesta de Dominion porque genera una facturación recurrente con la aumentar el flujo de caja que creció un 8%, hasta los 76 millones.

Dominion mantiene su política de dividendos. En 2024 abonó 14,7 millones, un tercio de sus ganancias, y para este año anuncia el pago de 15 millones.