«Para salir de la crisis hay que invertir más y mejor»

En Iberdrola se dieron cuenta rápido de que la pandemia del coronavirus iba a tener profundas consecuencias socioeconómicas, y que supondría un reto descomunal para continuar ofreciendo los servicios básicos que requieren sus clientes. Por eso, el consejero delegado de la Empresa del Año de los Premios Euskadi Avanza, Ignacio Sánchez Galán, subrayó ayer el orgullo que le produce haber superado los obstáculos que han representado los confinamientos y las diferentes restricciones impuestas para acabar con la crisis sanitaria preservando la salud de sus empleados.

«Las dificultades y las incertidumbres que hemos vivido durante el 2020 nos han obligado a cambiar nuestra forma de vivir, nuestra forma de trabajar, y nuestra forma de relacionarnos», subrayó Galán. Sin embargo, incluso en esta difícil coyuntura Iberdrola ve oportunidades históricas de negocio en la descarbonización de la economía y, a diferencia de lo que hacen otras empresas, apuesta por incrementar sus inversiones hasta un récord de casi 10.000 millones de euros. Junto con el aumento de las compras, eso ha permitido que los proveedores del gigante energético vasco, que representa en torno al 2,2% del PIB de Euskadi, no hayan tenido que plantear ERTES ni ERES. «Fue la mejor noticia que podía recibir. Hemos contribuido a una acción social», declaró Galán.

Y esa estrategia va a continuar. «Nuestro plan de inversiones para los próximos cinco y diez años nos llevará a nuevos récords de 75.000 y 150.000 millones de euros en 2030», avanzó el directivo. Iberdrola también ha presentado a los fondos europeos Next Generation 150 proyectos con el objetivo de movilizar nada menos que 21.000 millones de euros, que pueden crear hasta 45.000 puestos de trabajo en España.

Galán expuso claramente la razón de esta apuesta: «Para gestionar la crisis hay que invertir más y mejor, trabajar más y mejor, y ser más productivo. De las crisis no se sale solamente subsidiando. Eso es algo puntual».

El presidente de Iberdrola afirmó que Euskadi sabe cómo gestionar una reconversión, porque ya lo hizo tras el cierre de la industria pesada, pero advirtió de que en Europa se han dejado pasar trenes como el de las telecomunicaciones o el de los paneles solares, y que hay que subirse a los relacionados con las nuevas energías. «Si no lo hacemos nosotros, lo harán otros», sentenció.

«Vamos a dejar una deuda tremenda a las futuras generaciones y tenemos también la obligación de dejarles un mundo mejor.», afirmó después de reiterar el compromiso de la multinacional con Euskadi.