La patronal desoye los reproches de Ortuzar y pide respetar el acuerdo de la reforma laboral

Pero más allá de estas palabras, la realidad es que la reflexión del dirigente jeltzale han sido recibidas con «malestar y enfado», aseguraba ayer un líder empresarial vasco, para aclarar de forma inmediata que Confebask y las organizaciones territoriales que lo componen «no vamos a entrar al trapo». La estrategia de los empresarios, a unos días de la votación en el Congreso, es clara: «No merece la pena tensionar más un asunto en el que algunos partidos han sobreactuado en exceso», señalaban las mismas fuentes. En el seno de la patronal tampoco ocultan que la alternativa a la no aprobación de la reforma laboral, que mantendría intacta la legislación actual, «no es precisamente una tragedia».

La prueba de esa moderación táctica en las declaraciones públicas la dio ayer la patronal vizcaína, Cebek. «Es difícilmente entendible que se apueste por el diálogo social para luego no suscribir los acuerdos que se alcanzan entre las partes», señaló su secretario general, Francisco Javier Azpiazu, en lo que cabe interpretar como un último llamamiento a los partidos, y en especial a la formación jeltzale, para que respalden en el Congreso el texto de la reforma laboral.

La presidenta de Cebek, Carolina Pérez Toledo, también prefirió mantener un tono moderado y rehusó contestar de forma explícita a las acusaciones lanzadas desde el PNV para indicar, con clara indiferencia, que «son declaraciones que responden a intereses políticos».

Para los empresarios vascos es un contrasentido que el PNV se oponga a respaldar el acuerdo «por una cuestión menor, de escasa relevancia y que es de política con minúsculas», señaló ayer un destacado líder empresarial vasco a este periódico. En este contexto, recuerdan que el Ejecutivo de Iñigo Urkullu se ha quejado reiteradamente de la ausencia de los sindicatos nacionalistas ELA y LAB en las mesas de diálogo social y creen que es una contradicción oponerse ahora a los acuerdos que nacen del diálogo social. «Ya quisiéramos en Euskadi poder alcanzar acuerdos de este tipo con los sindicatos mayoritarios», dijo ayer el secretario general de Cebek.

«No es la legislación laboral que las empresas hubiéramos propuesto, pero creemos que hay que dar valor al acuerdo, al consenso y a la capacidad de los agentes sociales de huir de posiciones extremas y buscar territorios compartidos. Asimismo, pensamos que es bueno que los agentes sociales hayamos abandonado las posiciones más extremas en busca de un acuerdo que fuera un mínimo común denominador para todos», señaló Pérez Toledo.

Los empresarios vizcaínos aseguraron que no están «preocupados por el ámbito de negociación», porque existe un acuerdo en 2017 para garantizar la prevalencia de los convenios autonómicos. La presidenta de Cebek recordó que en la práctica la mayor parte de los sectores, al menos los más importantes en empleo, están vinculados a convenios provinciales. Matices que no contentan la reivindicación del PNV porque, como han señalado sus máximos responsables, todo ello es producto de pactos pero no tienen rango legal.