«Hay que ir hacia la descarbonización del parque de automóviles, con tiempo y sin histerias»

- Las ventas de automóviles no levantan cabeza en España en este arranque de año. Los incentivos se han limitado al coche eléctrico y el sector reclama un plan integral como el 'Eusko Renove'.

- Sin duda. Desde septiembre-octubre del año pasado, cuando el Gobierno hizo una declaración en contra de los motores diésel, el mercado se ha paralizado absolutamente, y con caídas mes sobre mes excepto en marzo. Lo que ha hecho el Gobierno vasco es lo que estamos pidiendo todos los fabricantes. Ha aprobado un plan de fomento de los motores más modernos, y los resultados están ahí. Las ventas han crecido a un ritmo del 30% cuando en el resto del Estado han caído del orden del 10-12%. Eso es lo inteligente y lo que debe hacer el Gobierno central.

-¿Qué previsiones de ventas maneja el sector para este año?

-Se preveía que fuera plano, es decir, que se mantuvieran las cifras del año anterior, 1.300.000 vehículos pero, tal y como está evolucionando en los últimos meses, es difícil mantener esa previsión. Podría estar por debajo.

-Y en el caso de Jaguar Land Rover, ¿cómo van las ventas?

- Nuestro sector es completamente distinto, porque nosotros, aparte de ser marca premium, cuanto más grande es el coche, más diésel se vende, y con la banalización de este combustible en los últimos meses nos vemos más afectados. El 85% de las ventas de Land Rover son diésel y en Jaguar, cerca del 80%. Somos las dos marcas más afectadas. Intentamos hablar con el Gobierno, con las comunidades autónomas y con los consumidores para transmitirles que los motores diésel nuevos contaminan muchísimo menos que los antiguos. La histeria que se ha producido en torno a los diésel ha hecho que se hayan vendido más gasolinas y que aumenten las emisiones de CO2. En vez de demonizar el diésel, lo que hay que hacer es preparar un programa que vaya hacia la electrificación, la descarbonización del parque, pero marcando unas pautas, un camino, sin histerias, sin comentarios banales como se ha hecho hasta ahora, que lo único que provoca es parar el mercado y fomentar un tipo de motores cuyo efecto es el contrario de lo que se propugna.

-¿Qué le pedirían al nuevo Gobierno que se va a formar?

- La asociación de fabricantes les hemos dicho a todos los grupos parlamentarios que lo que hay que hacer es fomentar la renovación del parque y cambiar el esquema de impuestos que tenemos en España, que no es en absoluto comparable al de Europa, donde no se paga por la matriculación sino por el uso del coche. Buscar un impuesto de matriculación exiguo y uno de circulación en función de las emisiones del coche. Los fabricantes tenemos claro que hay que ir hacia una descarbonización del parque, pero nos tienen que dejar nuestro tiempo. Mientras tanto, lo que conviene es vender motores diésel limpios, menos gasolina y más eléctricos, siempre que podamos. Y que haya infraestructuras de recarga y se hagan inversiones en ese sentido.

-¿La previsión del Gobierno de erradicar los motores de combustión para 2040 es demasiado exigente?

-Es absolutamente imposible. Los fabricantes no podemos seguir ese ritmo. No hay incentivos ni de vehículos eléctricos, ni de infraestructuras de recarga, ni de descarbonización del parque, ni de achatarramiento de vehículos para que eso se pudiera cumplir. Tendría que haber unas condiciones completamente distintas.

-¿Qué fecha sería razonable para esa transición?

-En España tenemos una antigüedad del parque de doce años. Para renovar todo ese parque hacia energías más limpias o pones un sistema de incentivos para achatarrar o no va a ser posible.

-¿El sector vislumbra algún plazo? ¿Podría ser en 2050?

-Sin un plan de incentivos es muy difícil establecer fechas. ¿2050? Incluso más.

-Pero Europa se marca también plazos similares.

-El Gobierno francés tiene un montón de dinero destinado al achatarramiento del parque antiguo, cosa que no ocurre aquí. Aquí lo que se hace es prohibir. Se prohíbe el diésel en el centro de Madrid, en Baleares... pero no se aprueba un plan de incentivos para renovar el parque. Un diésel de 17 años contamina lo mismo que diez diésel modernos.

-¿Se está preparando el sector suficientemente para esa transición?

-Sí, estamos empezando a lanzar productos 100% eléctricos, híbridos enchufables o híbridos. Todos los fabricantes estamos trabajando en ese sentido, pero necesitamos un esfuerzo por parte de la Administración paralelo para poder implementarlo.

-¿Un esfuerzo de cara a los fabricantes y de cara al consumidor?

-Así es. Ser usuario de un coche eléctrico ahora mismo es ser un aventurero en España. Realmente es así, porque aunque tengas un cargador en tu casa o en tu empresa, aventúrate a salir a un viaje de 300-400 kilómetros. Te cuesta un montón porque no hay puntos de recarga, ni siquiera de recarga rápida. Por lo tanto, cómo me puede forzar la administración a vender eléctricos cuando ella no está fomentando que existan puntos de recarga. Es un poco incongruente.

-En Euskadi hay empresas como Repsol que, junto al EVE, están instalando puntos rápidos de recarga.

-En general es todo iniciativa privada, y es como la pescadilla que se muerde la cola, porque en estos momentos solo el 0,05% del parque es eléctrico. Pónte tu a invertir en cargadores rápidos que cuestan un dinero, y si no pongo esos cargadores no se venden coches.

-En el tema de las baterías, China concentra casi toda la producción. En Europa hay ya una iniciativa para crear un consorcio para fabricar un elemento tan esencial. ¿Hay que ponerse las pilas, no?

-En Europa lo están liderando Alemania y Francia. En una reunión que tuvimos el otro día con la ministra de Industria en el Salón del Automóvil de Barcelona nos comentó que la idea del Gobierno es intentar unirse a ese grupo. En la Península hay recursos de litio en Extremadura y también en Portugal, suficiente como para plantearse fábricas de baterías de litio. La ministra está por la labor de empezar a incentivar eso. No deberíamos perder el carro.

-Pese a la apuesta decidida por el eléctrico, ¿no se puede dar todavía por enterrado al diésel?

-El último mes han subido las ventas del diésel. La gente se está dando cuenta de que al final es lo más razonable.

-¿A corto plazo se va a revertir la caída del diésel?

-Yo creo que va a haber un efecto rebote. Estoy convencido de que se empezarán a vender más GLP, GLC, eléctricos, híbridos enchufables... pero de momento es una tecnología muy cara. La gente no se lo puede permitir. A largo plazo sí llegaremos a ello.