Así ha sido el camino de la OPA de Más Móvil sobre Euskaltel

Euskaltel inició su cotización a 9,50 euros por acción, lo que equivalía a valorar la compañía en 1.202 millones. Ayer cerró a 10,92.

Euskaltel paga por el operador gallego R Cable 1.190 millones y, dos años después, 686 millones por la asturiana Telecable.

Para hacerse con Telecable, Euskaltel otorga a Zegona el 15% de su capital, que después elevará hasta el 21,4%.

Con Zegona, Kutxabank y la Corporación Alba, que suman el 52,32% de Euskaltel.

Aunque al final se abonaron 215, por haberse quedado con 230.000 clientes de Amena -adquirida por Orange- cuando se desligó de aquella operadora en 2006.

El equipo naranja se despidió en el Tour de Beijing después de que Euskaltel hubiera invertido 45 millones en sus 17 años de patrocinio. Pero vuelve a esponsorizarlo desde 2020.

De los departamentos de sistemas y mantenimiento de red, con la salida de unos 170 empleados de los 550 que entonces tenía Euskaltel.

Euskaltel sólo tenía licencia de operador virtual, lo que le obligaba a alquilar la red celular de otro operador, que desde 2006 era Vodafone. Pero a pesar del conflicto con Orange, en 2014 volvió a contratar la red de la compañía francesa.

para 25 directivos encabezados por su entonces presidente, Alberto García Erauzkin -recibió 9,2 millones-, por la salida a Bolsa de Euskaltel. Molestó sobremanera en el Gobierno vasco. Ante el escándalo -muchos de los beneficiados militaban en el PNV-, cobraron en acciones.

En mayo de 2019. En un mes despide a una veintena de directivos y a otros 25 mandos intermedios. En octubre se designa presidente no ejecutivo a Xabier Iturbe, entonces 'número dos' de Kutxabank, y se le incluye en el nuevo bonus de los directivos.

Como marca para la expansión nacional de la operadora vasca.