Euskadi jugará la final tras un tenso triunfo ante España

Los puntistas que dirige Roberto Lekue escucharon los primeros insultos desde la grada en todo el campeonato. Fue por parte de un reducido grupo de jóvenes, no más de una veintena, en el inicio del primer set cuando la igualdad presidió el marcador y la tricolor estaba por debajo en el marcador. 'Puta España, puta selección' o 'Españoles hijos de puta' fueron algunas de las frases que se pudieron oír. La intervención del speaker recordando el respeto y la educación que preside este deporte apaciguó los ánimos. Lo que no consiguió es que los mismos dejaran de pitar a Erik cuando iba a realizar el saque.

El buen arranque del combinado español pilló a los que vistieron de verde fríos. El delantero de Mutriku arriesgó y las cosas le salieron, mientras que atrás Mugartegi estuvo seguro. Llegaron a contar con un par de tantos de ventaja (3-5). Poco a poco los entrenados por Ander Bilbao se rehicieron e igualaron las fuerzas para empatar a siete. La tensión aumento según llegaba el final del primer juego porque lo hizo con diferencias mínimas en el luminoso para la tricolor y Erkiaga tuvo que echar mano de su gran repertorio para cerrar el juego (15-11).

El segundo fue bastante más cómodo para el de Ispaster y el de Zumaia. La primera victoria parcial les liberó de presión y se reconocieron en la cancha. Erkiaga estuvo mucho más activo y acertó en el remate, mientras que López aguantó atrás. Consiguieron romper el juego enseguida con un 6-2 a favor que les dio la tranquilidad necesaria y pasó toda la presión a sus oponentes. Erik y Mugartegi trataron de responder pero no encontraron la fórmula. En el 11-5 el delantero de España se retiró a los vestuarios con un problema en el pie, pero regresó a la cancha y terminó el choque. Sin embargo, tan solo pudieron apretar el marcador (15-9).

En la primera semifinal, Francia dio la sorpresa al imponerse a Estados Unidos en un duelo muy duro y trabajado. El técnico Philippe Etcheberry optó por alinear a Laduche en los cuadros alegres en lugar de Tambourindeguy, mientras que en la zaga fue para el poderoso Basque y acertó. Los norteamericanos siguieron con los hermanos Sorozabal.

Los cuatro puntistas se conocen a la perfección y arrancaron el choque a un ritmo endiablado en busca del error del rival. Los guardaespaldas alternaron el dominio y sus compañeros estuvieron muy activos en tapar huecos. Los galos comenzaron más asentados y llegaron a contar con cuatro tantos de ventaja, pero en el momento que Johan se enchufó todo empezó a igualarse. Empataron el set a ocho y a partir de entonces no hubo respiro. Los empates se sucedieron hasta el tanto trece. Un error de Johan y una buena derecha de Basque cerraron el juego (13-15).

En el segundo los tantos fueron bastante más cortos pero la emoción se mantuvo. Los franceses sabían que tenían que aguantar y sus rivales asumir más riesgos. Tras el empate a cinco los colorados pegaron un pequeño estirón, pero los galos mantuvieron la calma y remontaron. Nuevo empate a trece. Dos fallos de Johan dejaron a Estados Unidos sin final.