El LIV tiende otro puente con el golf clásico y logra un acuerdo con el Abierto Británico

La Royal & Ancient, la organización que gobierna el mundo del golf salvo en Estados Unidos y México, donde manda la USGA (United States Golf Association), da un paso adelante para la normalización de relaciones con el LIV, que ya ha alcanzado un acuerdo con la mitad de los torneos que destacan en el calendario. Faltan el Masters de Augusta y el PGA Championship, los primeros grandes que se asoman en el calendario en abril y mayo. Con este último parece más difícil ya que ambos circuitos siguen sin firmar la paz. Hay que recordar que los torneos del LIV, a tres días y sin cortes, siguen sin otorgar puntos para el ranking mundial.

De esta forma, el jugador que lidere la clasificación del LIV tras el torneo de Dallas (se celebra el último fin de semana de junio y es el noveno del calendario) recibirá una exención para disputar la 153ª edición del Open Championship, siempre y cuando no haya logrado la clasificación por otras vías. Si esto último sucede se pasará al siguiente en el ranking que ahora mismo lidera el polaco Adrian Meronk (Cleeks) tras ganar en Riad por delante de Rahm, cuyo equipo, la Legión XIII, se proclamó campeona tras una exhibición. La medida solo afectará a los cinco primeros de la tabla de la gira saudí.

Hay otra vía para los miembros del LIV de acudir a Royal Portrush, a través de las International Series de Macao del circuito asiático, que se celebran del 20 al 23 de marzo en un fin de semana de descanso en el LIV. A diferencia del PGA americano y el DP World Tour europeo, que han expulsado el primero y vetado salvo multa económica el segundo a los jugadores que han fichado por la liga financiada por el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí, el asiático no ha roto relaciones con la rompedora liga. Es más, al final de año su mejor jugador obtiene una plaza en el LIV.

Jon Rahm no necesitará ninguna de las dos vías. El vizcaíno ya tiene un hueco en The Open como ganador tanto del US Open como del Masters en los últimos cinco años. Además, el año pasado logró un séptimo hueco que también le otorga un billete en la siguiente edición (lo consiguen aquellos que terminan entre los diez primeros). Otros once miembros del LIV tienen también asegurada su plaza: Bryson DeChambeau, Tyrrell Hatton, Dustin Johnson, Brooks Koepka, Marc Leishman, Tom McKibbin, Phil Mickelson, Joaquín Niemann, Louis Oosthuizen, Cameron Smith y Henrik Stenson.

El castellonense José Luis Ballester, de 21 años y ganador del US Open amateur en 2024, también tiene plaza, al igual que en el Masters y el PGA Championship. Por el momento él y Rahm son los únicos españoles en estar ya clasificados. En este enlace puede consultar la lista de admitidos y los requisitos. Quedan muchos torneos del circuito europeo para lograr que otros representantes nacionales acudan a la cita, además de los tres que están en el LIV: Sergio García, David Puig y Luis Masaveu, todos ellos en los Fireballs que capitanea Sergio, que estará en el Masters (lo puede hacer de por vida por haberlo ganado en 2017) y en el PGA Championship, que le ha otorgado una invitación.

«LIV continuará con su misión de llevar a los mejores jugadores a los cuatro rincones del mundo para hacer crecer este juego. Estamos entusiasmados por el futuro de este gran deporte», ha dicho el nuevo director ejecutivo de LIV Golf, Scott O'Neil, que sustituye en el cargo a Greg Norman. «Reconocemos que los jugadores que compiten en LIV Golf también deberían tener la oportunidad de asegurar lugares en The Open a través de sus clasificaciones de temporada individuales, así como de los caminos existentes», ha añadido Mark Darbon, su homólogo de la R&A.