El Arenas sigue su racha triunfal gracias al único gol de Gabriel

El equipo txuri-urdin se ha dejado la piel y ha gozado de un buen puñado de ocasiones que no ha llegado a materializar. Pero también el Arenas ha generado peligro sin acertar, en un primer periodo muy revolucionado. A los rojinegros de Javier Olaizola les ha correspondido el dominio inicial. Rupérez ha firmado la primera incursión peligrosa, pero su disparo ha golpeado en un defensor. La réplica de los de Gobela se ha producido solo un par de minutos después, en el 12, cuando Gabriel Izarra ha engatillado una chilena que se ha marchado alta.

A partir de ahí han arrancado los mejores minutos visitantes. Los de Mikel Llorente han llegado, pero sin atinar. Primero Arzak no ha alcanzado por pocos centímetros un pase de la muerte que olía a gol. Luego Landeta ha detenido primero un libre directo botado por Rupérez, y después el cancerbero ha sacado con los puños un chut envenenado.

El equipo txuri-urdin se fajaba en apretar. Y lo cierto es que muchos intentos locales de avanzar acababan en pases al portero para que sacase el balón en largo. Aunque este joven Arenas ha sabido otra vez gestionar y sacudirse la presión. Ha firmado sus mejores ocasiones pasada la media hora de juego. En el 37, bien se pudo adelantar en un lío en el área que Íñigo López no ha podido resolver por el acierto de Fraga y la zaga rival. Ha sido la mejor oportunidad para los getxorras, mientras que para los rivales ha sucedido en el 40. Gomeza se ha llevado el protagonismo al sacar el balón bajo palos. Y es que el central se ha exhibido en sacar el esférico jugado desde atrás y en animar a todos en el terreno de juego, en un día festivo tan especial.

Tras la reanudación, la marcha del partido ha cambiado. Al saque de una falta, un balón despejado ha caído en el área. Allí estaba A. Gabriel solo y con sangre fría ha colocado el balón perfecto, entre un bosque de piernas. Gobela ha estallado de alegría con el 1-0 del minuto 49. Aunque al filial de la Real Sociedad le ha costado digerirlo. Ha pasado unos minutos sin capacidad alguna de buscar huecos en ataque. En cualquier caso, los getxotarras han controlado bien en defensa, con seguridad.

Un disparo flojo y desviado de Eder García ha sido la única credencial que ha exhibido el conjunto albiazul, aparte de saques de esquina y jugadas a balón parado en las que la hegemonía se la han también llevado los de Olaizola. Claro que todo podía haber cambiado ya en tiempo de descuento. Azurmendi ha servido una falta que Ekain Orobengoa ha estrellado en exterior de la cruceta, casi sin ángulo. Un susto tras el que se ha desatado la fiesta en el campo, con un Arenas que ilusiona y convence a su afición.