El Amorebieta da otro paso de gigante hacia el ascenso

Éxtasis en Urritxe con la sexta victoria consecutiva que encadena el Amorebieta, esta vez doblegando al histórico Real Murcia en un encuentro pleno de intensidad y emoción. Una victoria trabajada y que se forjó en un magistral arranque de la segunda mitad. En apenas quince minutos, los de Haritz Mujika abrieron brecha ante los pimentoneros con los tantos de Pradera y Mier. El gol de Dani Vega le puso más picante al choque, pero los puntos se quedaron en casa. El Amorebieta es un poco más líder ya que el Eldense solo pudo empatar en su feudo con el Barcelona B, por lo que la brecha es ya de cuatro puntos sobre los alicantinos a falta de solo tres jornadas para el final de liga.

El choque tuvo un arranque vertiginoso, con los dos equipos peleando de poder a poder por cada balón dividido. Fue el Amorebieta el que le puso más ímpetu a los primeros compases, generando algunas buenas llegadas en las que faltó, no obstante, remate. Jauregi forzó un saque de esquina tras un buen servicio de Mier en el siete de juego, y en el doce mandó junto al palo un balón servido por Rayco.

El Murcia tenía la consigna clara, cerrar bien atrás, tratar de no sufrir y golpear en la contra. Y a punto estuvo de hacerlo pasado el cuarto de hora de la mano de su máxima estrella, Pedro León. El muleño puso un nudo en la garganta de la afición local en una contra de libro. Recibió en la frontal, recortó a Toni Herrero y la puso al segundo palo, donde acabó impactando el cuero.

El conjunto grana llegó menos que el Amorebieta pero generó más peligro. En una falta lateral servida por Pedro León, estuvo de nuevo cerca de adelantarse en el marcador. Lo evitó providencial una jornada más Magunagoitia, que sacó una mano salvadora a un balón que había despejado Jauregi hacia su propia portería.

Superada esa fase de mayor agobio para los Haritz Mujika, recobraron el dominio de la situación y trataron de romper la igualada antes del descanso. El protagonismo recayó en el canario Rayco, que tuvo dos opciones claras. En la primera de ellas, no llegó a remachar tras controlar el balón con el pecho dentro del área. La más clara llegó ya en el descuento, en un lanzamiento de falta directa que colocó por encima de la barrera pero que acabó siendo repelido por el travesaño.

El arranque de la segunda mitad fue clave. El panorama cambió radicalmente apenas un par de minutos después de la reanudación cuando Pradera, tras un saque de falta de Toni Herrero como la pasada semana en Calahorra, mandó el balón al fondo de las mallas aprovechando la indecisión de la zaga pimentonera. Urritxe se vino arriba y el Amorebieta tocó a rebato. Rayco se topó de nuevo con el travesaño en un latigazo desde la frontal, y Jauregi tuvo de nuevo el gol en sus botas pero mandó el cuero desviado. El pichichi azul, por cierto, se perderá la próxima jornada tras ver la quinta amarilla. El éxtasis llegó a la hora de juego con el misil que conectó Jorge Mier desde más allá de la media luna del área, que se coló por la escuadra de un Serna que llegó a rozar el balón.

La alegría, sin embargo, no fue total porque el Murcia acortó distancias demasiado rápido. Solo tres minutos después Dani Vega metió de nuevo a los de Mario Simón en el partido. Esos veinticinco minutos finales fueron un constante sufrimiento para la parroquia zornotzarra. Por un lado, porque los de Haritz Mujika no lograron matar el partido en las ocasiones que tuvieron para hacerlo, como el disparo de Jauregi casi a placer que mandó fuera o un remate de Julen Jon a centro de Buján que cruzó demasiado. Y, por otro, porque el conjunto grana fue encerrando a los vizcaínos sobre su área con centros desde cualquier parte del campo, aunque sin llegar a generar remates de verdadero peligro. De eso se encargó el Amorebieta, que se enfundó el mono de trabajo para defender su renta y acariciar un nuevo ascenso a Segunda División.

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