El Dinamo San Juan gana un apasionante duelo de vecinos y logra billete a la previa de la Copa

La División de Honor en Bizkaia ya ha llegado a su fin y lo ha hecho por todo lo alto. Ha habido emoción hasta el final y es que la última jornada ha sido trepidante, con tres escuadras jugándose simultáneamente el liderato, la única plaza que otorga el ascenso a Tercera RFEF. Finalmente, el Padura no ha dado lugar a la duda y ha conservado la primera posición, imponiéndose con claridad al Zamudio (3-0). Es por ello que el vibrante derbi entre el Dinamo San Juan y el Santurtzi se ha limitado a decidir quien ocuparía la segunda plaza, que da derecho a disputar la previa de la Copa del Rey.

El derbi santurtziarra atrajo la atenta mirada de alrededor de 1.300 asistentes al escueto campo de fútbol de San Juan. Una entrada histórica, insólita hasta la fecha. Gente de todas las edades del pueblo se movilizó en el que era el gran evento de la localidad este fin de semana. Aunque, los vecinos del barrio de San Juan fueron mayoría y abarrotaron su feudo, ya fuera en el interior de las instalaciones, así como en las campas de los alrededores, desde donde pudieron encender numerosas bengalas y teñir todo de humo morado nada más salir los jugadores al verde. El espectáculo de colorido y cánticos estaba garantizado.

De hecho, la fiesta comenzó varias horas antes en el barrio santurtziarra, con los más jóvenes realizando una kalejira muy numerosa. Una vez en el estadio, ambas aficiones tuvieron un comportamiento ejemplar. Reinó el buen ambiente a pesar de la fuerte rivalidad y todos pudieron disfrutar de un derbi donde nunca había habido tanto en juego. En cuanto a lo del verde se refiere, se presuponía que en un campo de tan estrechas dimensiones, se iba a imponer el equipo más intenso y quien estuviera más vivo en el juego aéreo, los balones divididos y, sobre todo, las jugadas a balón parado.

Conocedores del terreno y con el incansable impulso de su ruidosa hinchada, el Dinamo San Juan dominó todas esas facetas durante toda la primera mitad. Eso le hizo irse 2-0 al descanso, con los goles de Rouco en una falta directa botada a la perfección y de Erik, al cazar un tercer rechace en un córner muy mal defendido por el Santurtzi. Fue entonces cuando buena parte de los aficionados locales se preguntaban qué estaba ocurriendo entre el Padura y el Zamudio. Tocaba estar pendiente del teléfono móvil e informarse por la vía que hiciera falta. Las noticias no fueron halagüeñas. Los de Arrigorriaga vencían por 1-0.

Menos lo serían con el transcurso de los minutos. El Padura terminó venciendo por un contundente 3-0 y lograron un más que meritorio ascenso, ya que al principio de este curso no estaban en prácticamente ninguna quiniela. Estos lo celebraron subidos en un camión que recorrió las calles del pueblo. Aun así, la expectación no decayó en San Juan. Todavía estaba en juego la segunda plaza, que supone disputar el triangular frente al segundo clasificado del grupo guipuzcoano y alavés, cuyo vencedor da acceso a la Copa del Rey. Aunque, sobre todo, estaba en juego el orgullo de un derbi sin precedentes.

El Santurtzi apretó las tuercas con un polémico tanto a raíz de un saque de banda, que el colegiado consideró que rozó en Aketza de la Rosa. Mientras, los jugadores del Dinamo San Juan protestaron alegando que no la había tocado nadie, por lo que debería haberse anulado. El guardameta, que colgaba las botas hoy tras trece temporadas defendiendo la portería del club, fue ovacionado al término del choque, cuando su hermano y entrenador decidió sustituirle. El Dinamo San Juan pudo conservar esa ventaja y certificó un triunfo icónico para redondear su mejor temporada de la historia.

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