Brighton, Udinese, Friburgo y Lorient, revelaciones de las ligas europeas

Llegados al primer parón de la temporada, con siete jornadas disputadas en Italia, Alemania e Inglaterra y ocho en Francia (en la Premier se suspendió una jornada debido al fallecimiento de la reina Isabel II), es obligado destacar aquellos equipos que están rindiendo muy por encima de sus posibilidades y, sobre todo, de las expectativas con las que partían. Estas son hasta ahora las cuatro mayores sorpresas de las grandes ligas europeas.

Desde la llegada de Graham Potter en 2019, el Brighton no ha hecho más que crecer. Una política de fichajes interesante y un entrenador con una clara apuesta por el fútbol asociativo fueron los ingredientes de un cocktail que permitió al equipo de la costa sur de Inglaterra mantenerse dos años en la Premier. En su tercera campaña tuvo un gran inicio y logró un meritorio noveno puesto. Esta temporada las cosas no podían haber comenzado mejor. En la primera jornada ganó en Old Trafford y, desde entonces, sumó victorias de prestigio ante Leeds y West Ham y una sola derrota. En la última jornada disputada, los 'seagulls' brillaron en su máxima expresión goleando por 5-2 al Leicester. Se situaban cuartos en la clasificación, en puesto de Liga de Campeones. Tras el partido, sin embargo, cayó un jarro de agua fría sobre el equipo, ya que se confirmó que Graham Potter había decidido aceptar la oferta del Chelsea, que acababa de despedir a Tomas Tuchel. Para sustituirlo, la directiva del Brighton ha contratado a Roberto de Zerbi, uno de los entrenadores jóvenes más estimulantes. Su Sassuolo de hace dos temporadas era uno de los equipos más atractivos del continente y, a pesar de su decepcionante paso por el Shakhtar Donetsk, llega a Inglaterra con ganas de reivindicarse. La buena suerte se ha aliado con el Brighton, ya que a la jornada suspendida por el fallecimiento de la reina, se ha sumado la suspensión de su siguiente partido y el parón de selecciones, lo que ha dado a De Zerbi un valioso tiempo para conocer a su plantilla y comenzar a implantar sus ideas.

En 2012, el Udinese llegó a clasificar para la Champions League, comandado por su fenomenal delantero Antonio di Natale. A partir de entonces, el equipo comenzó una travesía por el desierto que se acentuó con la retirada del Toto. Durante varias temporadas, logró la salvación de forma ajustada y en los últimos años ha estado instalado en la mediocridad de la mitad de tabla. Todo parece haber cambiado esta campaña con la llegada de Andrea Sottil como entrenador tras su buena labor en el Ascoli de Serie B. El equipo ha comenzado el curso como un tiro y ahora mismo es tercero en la clasificación, a un solo punto del Napoli y el Atalanta. Dos jugadores son los grandes responsables del éxito del equipo de Udine. El primero es Beto, un delantero portugués que llegó la temporada pasada a Italia y que lleva ya cuatro goles. El segundo es un viejo conocido del futbol español, Gerard Deulofeu, que afronta su tercera campaña en el Udinese. En la anterior ya brilló a un gran nivel, con catorce goles, y ha comenzado este nuevo curso en el mismo estado de forma. A pesar de que en los dos partidos iniciales solo sumó un punto, el Udinese es el equipo más en forma de Italia, con cinco victorias seguidas, dos de ellas de mucho prestigio pues goleó por 4-0 a la Roma y venció al Inter por 3-1.

Aunque la gran revelación de la Bundesliga sea el Unión Berlín, flamante líder de la competición, las actuaciones del Friburgo también merecen ser tenidas en cuenta. Se trata de un club especial en Alemania. Desde 1991 hasta el 2007, fue dirigido por Volker Finke (nadie ha durado tanto tiempo dirigiendo al mismo club en Bundesliga) y fue en aquellos años cuando se ganó el apodo de Breisgau-Brasilianer (los brasileños de Brisgovia) por la belleza de su fútbol. En 2012, llegó al club Christian Streich y todavía se mantiene como entrenador a pesar de que llegaron a descender de categoría. Por eso el Friburgo es especial, un club fiel con sus empleados y que entiende que, en el fútbol, como en la vida, todo necesita tiempo. Los años han dado la razón a su directiva ya que en las últimas campañas el equipo ha mejorado progresivamente. La temporada pasada fue el punto culminante, cuando el equipo terminó en sexta posición, clasificando para la Europa League, después de haber tenido la Champions League en la mano durante gran parte del año. Además, alcanzó la final de Copa, aunque la perdió de forma dramática en los penaltis ante el Leipzig. Esta campaña sigue al mismo nivel. Es tercero y tuvo opciones incluso de ponerse líder, pero dos empates en los dos últimos encuentros frustraron la posibilidad de verse en lo más alto.

Tras once temporadas consecutivas en Ligue 1, el Lorient descendió a segunda división en el año 2017. Tres campañas tardó en regresar a la élite y lo hizo con un punto de fortuna. El equipo lideraba la clasificación de la Ligue 2 en el momento en el que el campeonato se suspendió por el coronavirus, pero tan solo le separaban cuatro puntos del quinto clasificado. En cualquier caso, la polémica decisión de la federación francesa de no terminar las competiciones provocó el ascenso automático del Lorient. Tras dos años en los que han sufrido para mantener la categoría, esta temporada, les merlus, (las merluzas), apodo por el que es conocido el equipo y que llevan en su propio escudo, están disfrutando de lo lindo. Su entrenador es Régis le Bris, un exjugador francés, sin ninguna experiencia previa como técnico, pero que está haciendo un trabajo fantástico con una plantilla de recursos limitados. El Lorient ha llegado a este parón en tercera posición con 19 puntos, en puestos de acceso a la Champions, algo que no han conseguido en toda su historia. En un equipo que cuenta con varios canteranos, la estrella es Terem Moffi, un delantero nigeriano que llevaba dos temporadas a buen nivel pero ahora se está consagrando. Con seis tantos en ocho partidos, solo Neymar y Mbappé le superan en la tabla de goleadores.

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