Roglic culmina la exhibición del Jumbo en el Dauphiné

Primoz Roglic aparcó sus dudas después de dos meses de incógnitas, con problemas en la rodilla. Desde que finalizó la Itzulia, el esloveno no había podido brillar, pero después de tomarse un tiempo de recuperación demostró en tierras francesas que llega a tiempo para presentar batalla en el Tour. Eso sí, el Jumbo dejó claro que cuenta con una firme alternativa para pelear con Pogacar en caso de que Roglic no esté al cien por cien. Jonas Vingegaard demostró estar a la misma altura (por lo menos) que el balcánico en la ascensión final al Plateau de Solaison, un puerto de categoría especial en el que ambos corredores del Jumbo dominaron a su antojo y donde el danés dio la sensación en ocasiones de estar más fuerte incluso que su propio líder. Ambos llegaron de la mano a la meta, donde se repartieron todo el pastel. Para Vingegaard la etapa y para Roglic, la general.