Laso expone «la confirmación plena de los médicos» para seguir entrenando

A través de su cuenta en una red social, Laso contrarrestó ayer de plano -aun sin nombrarlo- a Juan Carlos Sánchez, responsable de la sección madridista que mantiene desavenencias añejas y cocidas a fuego lento con el preparador vitoriano. «Feliz de compartir con todo el mundo que tengo la confirmación plena y expresa de los médicos que me han atendido de que puedo entrenar profesionalmente a cualquier club de baloncesto». Un mensaje de Pablo subido a las 13.18 horas, un día después de destaparse el relevo oficial en el banquillo del WiZink Center.

Sánchez ya regentaba la sección de baloncesto del Real cuando el club contrató hace once años al entrenador alavés con el aval relevante de Alberto Herreros. Sin embargo, la convivencia entre ambos -directivo y técnico- viene pudriéndose desde poco después. Ya en 2014 Juan Carlos destituyó a los ayudantes de Laso. Pero éste aguantó el embate como también ha resistido otros sucesivos. Toda una puesta en práctica del 'Manual de Resistencia'.

El máximo cargo de la sección ha criticado algunas decisiones de su ya expreparador y apenas le ha bailado el agua tras los numerosos éxitos del equipo con Pablo como entrenador. Once campañas, veintidós títulos -incluidas dos Euroligas- y 659 triunfos en 860 encuentros oficiales. Con muy buenos jugadores, sí, pero devolviendo el esplendor a un club que degeneraba en la intrascendencia antes de su llegada.

Sánchez y Laso han colisionado en aspectos muy sustanciales, como la configuración de las plantillas. El caso reciente más llamativo alude a Thomas Heurtel, un base con tanto talento como difícil de querer que pretendía el directivo tras su paso por el Barça y no parecía encajar en la idea del técnico. El entrenador vitoriano apartó al francés por cuestiones disciplinarias y el directivo le reprochó en voz baja que no lo utilizase para la Euroliga que el Madrid cedió por un solo punto ante el Anadolu Efes.