Un punto que reconduce el camino

El propio Mikel Crespo reconoció en rueda de prensa que, para conseguir un buen resultado en cada partido, el equipo debe «estar sólido durante los noventa minutos, tanto en la fase defensiva como ofensiva», palabras que el equipo se tomó al pie de la letra desde los primeros minutos del derbi vasco ante un Athletic Club férreo en defensa y que impidió que el juego del Deportivo Alavés fluyera de forma intermitente. A pesar de todo, las albiazules fueron las que más ocasiones crearon, poniendo en apuros a Mariasun Quiñones. En el minuto 10 de partido, el poste impidió que el remate de Gema pusiera por delante a las Gloriosas en el electrónico. Las vitorianas se mostraron cómodas con la pelota, faceta que en los últimos duelos ligueros no se vieron de forma permanente, especialmente ante el Villarreal hace dos semanas.

Garazi, que fue un dolor de cabeza constante desde el costado izquierdo, propició las dos primeras amarillas de un Athletic Club que sufrió cada vez que el Alavés avanzaba mediante el contraataque. Ofensivamente y defensivamente, el Alavés dio un paso hacia adelante, ejerciendo presión cada vez que perdía el esférico y adelantando líneas en busca del error de las jugadoras visitantes. Una vez superada la primera media hora de juego, llegó el primer gol del derbi vasco. La propia Garazi, con un centro raso hacia el área, conectó directamente con Carla Armengol. La atacante, sin pensárselo dos veces, se deshizo de Nerea Nevado con una finta y, al momento, se sacó a la chistera un disparo que se coló en la escuadra derecha defendida por Mariasun Quiñones. En esta ocasión, la guardameta vizcaína no pudo evitar un gol que, por cantidad de ocasiones y peligro generado, se transformó en un gol merecido a favor de las pupilas de Crespo.

Los más de 150 aficionados que se acercaron a Ibaia vibraron con el tanto de la catalana, que se estrenó como goleadora en la actual temporada. El Athletic Club, más allá de desanimarse,se activó por completo, mostrándose eficaz en el pase y generando serio peligro al Alavés. Tras provocar dos saques de esquina consecutivos, el cuadro de Iraia Iturregi encontró petróleo en una jugada embarullada tras un pase de Nerea Nevado que fue dirigido a Mariana. La jugadora, en un intento de disparo desde del área, erró en la dirección del tiro y cayó en los pies de Azkona. La atacante, en un uno contra uno ante Larqué, novedad en el equipo titular, superó a la maña con un disparo raso.

A partir de la igualada, el derbi vasco se vio protagonizado por la igualdad tanto en ocasiones como en posesión de balón. Las Gloriosas buscaron cambiar el guion del encuentro con la entrada de Carrillo en la punta de ataque, pero el último pase fue la asignatura pendiente de las vitorianas. A falta de tres minutos para el final, Camila Sáiz trató de poner por delante al Alavés con un cabezazo que se marchó por encima de la portería de Quiñones. Una ocasión que cerró un derbi vasco con nota positiva para las de Mikel Crespo y que les permite reconducir su camino hacia la permanencia. La próxima semana, segundo derbi vasco de la temporada, ante la Real Sociedad.