Un italiano desvela en 'First Dates' que usa un «pepino congelado» como juguete sexual
La confesión de Fabio dejó boquiabierta a su compatriota Ilaria, con quien no tuvo química
A.M.
Martes, 30 de enero 2024, 08:15
La cita entre Fabio e Ilaria fue una de las más tensas que se recuerdan en la historia de 'First Dates'. Dos italianos afincados en España, que lejos de conectar por sus orígenes, se rechazaron el uno al otro nada más verse. Lo que mal empieza... puede acabar aún peor.
Cuando Ilaria entró por la puerta del restaurante y Sobera le presentó a Fabio, el rostro le cambió. Sin ningún tipo de pudor rechazó a su cita de inmediato. «No quería italianos...», reprochó. «Me gustan altos...», insistía pese a que Fabio era más alto que ella incluso con los tacones puestos.
Él aguantó el chaparrón y ambos se dieron una pequeña oportunidad. Se sentaron a la mesa a comer pero pronto se torció todo. Ilaria le reprochó a Fabio que «hablas mucho», y él trató de romper el hielo a base de humor pero le fue imposible.
Entonces el italiano tropezó al confesar su prototipo de mujer. «Me gustan las chicas de pelo largo y negro». Ilaria, que cumplía el segundo requisito y no el primero, estalló contra él: «Y yo había pedido un chico alto y tú no eres alto». Él se ofendió y le retó a ponerse de pie y comprobar la altura de ambos: «No eres más alta que yo, llevas tacones». Pero a Ilaria el comentario le sentó muy mal y comparaba a su cita con el camarero del programa: «Yo quería uno como Matías, pero no ha podido ser».
El programa entonces decidió pasar a las preguntas más picantes, a ver si con suerte ambos se soltaban más y dejaban atrás la tensión. Pero fue peor aún. Ilaria le preguntó a Fabio por su fantasía sexual y este aseguró que «me gustaba mucho hacer el amor con la pelota de pilates porque te da empuje». Ella, asombrada, respondía con sarcasmo: «Interesante, va bien para la espalda, no lo he probado».
Pero si la cosa ya iba mal, acabó mucho peor cuando Fabio confesó cuál era uno de sus juguetes sexuales. «Tengo un pepino en el congelador para practicar sexo anal». Ella, irónica, afirmó que ella tenía «guisantes y brócoli». Después, ante las cámaras, se mostraría molesta con el italiano: «Que se quede con el pepino y que le haga compañía».
La siguiente prueba que les dejó el programa fue darse un beso sensual. Ella, en cuanto lo leyó, envolvió el papel y lo volvió a esconder. «Este sí que no». Fabio, que no sabía lo que estaba escrito, quedó muy molesto y explotó contra Ilaria: «Llevo toda la cita callando por respeto. Tú a mí tampoco me gustas pero es un tema de respeto», repetía constantemente.
Ambos dieron la cita por concluida y ni siquiera se dieron dos besos para despedirse.