Julian Iantzi, sobre 'El Conquistador': «Raquel quiere ir de poli buena y que yo sea el malo. ¡Ni hablar!»

Las comparaciones van a ser «inevitables», así que el empeño de Julian Iantzi es que haya poco para comparar. TVE estrenará en otoño su versión de 'El Conquistador del Caribe', aunque será un 'reality' 'made in Euskadi'. «La cadena nos ha pedido un programa tipo vasco», confirma Iantzi, que presentará el concurso junto a Raquel Sánchez Silva. «Me dice que quiere ir de 'poli buena' y que yo haga de 'poli malo'. ¡Pero de eso, nada!», bromea. En el taxi de camino al aeropuerto, avanza qué veremos en unos meses en la edición de Televisión Española, que empezará a grabarse «ya» en el parque nacional de Los Haitises, en República Dominicana, el mismo lugar del 'reality' de ETB-2.

- ¿De verdad que van a ser tan duros como en la edición vasca?

- Sí, sí. Los concursantes las van a pasar canutas. Van a conocer sus límites físicos y mentales de verdad.

- Cuando explicaron en TVE que aquí hay concursantes que pasan cinco o seis días sin comer, ¿le dieron vía libre?

- Fliparon.

- ¿No se achantaron?

- No, no. El éxito del programa es precisamente ese. La supervivencia.

- Por lo menos los concursantes de TVE aspiran a un premio de 100.000 euros...

- Sí, en ETB son 20.000, que también es un dinero, pero aquí nadie va por el premio. Si la cabeza allí no te da, por mucho que haya 100.000 euros no va a servir de nada. Ojalá que en esta edición el premio sea una cuestión de segunda.

- Va compartir la tarea de maestro de ceremonias con Raquel Sánchez Silva. ¿Qué feeling hay?

- Muy bueno, tenemos buena onda. Habíamos coincidido alguna vez y ella ya conocía el programa y me decía que le encantaba la dureza. 'Eres muy duro, no tienes corazón', me reprochaba de broma. En cuanto supe que era ella la otra presentadora la llamé, me parece una de las mejores profesionales que hay y tiene mucha experiencia en 'realities', así que vamos los dos bastante cubiertos. Yo me fío de ella y ella de mí. Ayer me dijo que quería hacer de poli buena y que yo hiciera de malo, pero de eso nada. No se va a escaquear del marrón, ja, ja, ja.

- ¿Va a ser tan 'chinche' como lo es en la versión de ETB?

- Pues fíjate que no no me veo tan 'chinche' como dicen. ¡Si yo me porto bien, solo comento la jugada! Hay que desenmascarar a los concursantes, enredarles un poco. Igual es que llevo tanto tiempo haciéndolo así que ya no me doy ni cuenta.

- La mítica prueba del cerdo, la de las cacatas, la de los bulones que el otro día nadie fue capaz de acabar en el duelo... ¿Veremos esas pruebas en TVE?

- Con los animales siempre hay gente que se puede ofender, pero nunca los matamos para hacer las pruebas. No matamos el cerdo y, de hecho, luego se aprovecha. En este programa se cuida mucho la conservación del entorno. Antes de arrancar a grabar hay un equipo que va a limpiar, en mar y tierra, el entorno donde vamos a estar. Tenías que ver los metros de desechos y basura que encontramos amontonados en la orilla. Todo eso lo limpiamos y lo dejamos mejor que estaba. Y, respecto a la prueba del otro día, la de los bulones, te diré que eso se entrena en gimnasios de crosffit, eso la gente lo hace. Otra cosa es poder hacerlo allí con el desgaste que llevan los concursantes, pero no son pruebas imposibles, ni mucho menos.

- TVE ya ha desvelado muchas cartas, por ejemplo quiénes serán los capitanes: el ex futbolista Patxi Salinas, el entrenador Cesc Escolá y la boxeadora Joana Pastrana.

Sí, me ha sorprendido porque en ETB jugamos mucho más al secretismo. Me gustan los capitanes. Patxi Salinas, que ya estuvo en 'El Conquistador', tiene mucho carácter y le da mucha salsilla al programa, aunque las hemos tenido, ¿eh? Porque te busca y porque le encuentras. Joana, la boxeadora, es una mujer muy dura que no va a hacer amigos. En la presentación me miró y dijo: '¿Este señor va a volver a presentar?'. ¡Me llamó señor! Empezamos mal... Y Cesc es un tipo risueño y encantador, muy majo... Habrá que ver cuánto le dura allí la sonrisa.

- Y en su casa, ¿han recibido con alegría este nuevo encargo? Porque si antes pasaba tiempo fuera, ahora, más.

- ¡No quiero ni pensarlo! Están acostumbrados, llevamos así veinte años. Pero cuando estoy en casa, estoy veinticuatro horas con ellos, soy muy casero e intento compensar.

- Eso es porque le tratan bien a la vuelta y le preparan bacalao con patatas, ¿eh?

- Sí, ja, ja, ja. Ya saben que si no hay bacalao con patatas no entro en casa.

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